En una clase de kinder donde hay niños de 5 años que recién pisan el colegio presencial, la maestra les habla de las emociones, de cómo identificar la alegría, la tristeza, el asombro. La miss les hace los gestos, ellos solo ven los ojos… algo hay detrás de la mascarilla, pero se pierde en el camino. ¿Cuánto queda oculto detrás?
La miss de inglés del mismo salón tiene la tarea de enseñarles la pronunciación de la th. Para que digan three y no tree, la lengua se debe poner entre los dientes, pero los niños no lo pueden ver; y ella, su maestra, tampoco los ve. El aprendizaje por imitación no se da. La clase está perdida.
MIRA TAMBIÉN: Asedios a la verdad, por Jerónimo Pimentel
Una experta en lenguaje me ratifica que ve muchas deficiencias en el lenguaje, sobre todo en la pronunciación de estos niños enmascarillados. Esta situación se presenta en todas las clases sociales debido a que no están ejercitando adecuadamente los músculos de la cara, especialmente los que están entre la nariz y el labio superior.
La OMS nunca recomendó el uso de las mascarillas para menores de 6 años. El Perú hizo caso omiso y esta parte no la aplicó. Por el contrario, decidió que los niños de 2 años estén obligados a usarla para ir al nido. Niños que recién están aprendiendo a hablar tienen que estar horas con la mascarilla puesta. Es como aprender a caminar con los pasadores atando ambos pies. Muy difícil.
La pandemia es dinámica y los protocolos van cambiando, pero Perú una vez más queda rezagado en la región. Nuestra vecina Colombia retiró las mascarillas en los colegios esta semana, nuestros amigos de Argentina ya la habían retirado para niños desde inicial hasta tercer grado primaria y ya lo extendió a todo nivel. Uruguay ya no las usa y en los principales estados de Brasil tampoco se usa.
COMPARTE: Salón de armas, por Renato Cisneros
¿Qué tiene que pasar en Perú para que se den cuenta que lejos de protegerlos con mascarillas los estamos perjudicando severamente? Los adultos tampoco aguantamos tantas horas las mascarillas y, por último, tenemos la discrecionalidad para sacárnosla cuando queramos. Pero los niños, una vez más son los que tienen que seguir estas reglas, reglas que los siguen perjudicando.
Perú fue uno de los últimos países en el mundo en abrir los colegios, se demoró dos años en tomar la decisión. No les fallemos a nuestros estudiantes otra vez. //
* La autora es comunicadora e integrante del colectivo Volvamos a Clases Perú. La opinión vertida en este texto es a título personal.