El Huáscar es un rompecabezas. Por un lado, una pieza clave para entender la peruana caballerosidad de Miguel Grau Seminario en una guerra. Por otro, la delirante promesa de un candidato que anunció el regreso del buque peruano desde Chile, como si se tratara de comprar un Condorito (1). El Huáscar es el penúltimo Inca en las Láminas Huascarán y foto de portada de mi Escuela Nueva de tercer grado A; es una avenida en Villa El Salvador, un parque zonal de Serpar, una cebichería cerca al Mercado N 1 de Surquillo. Huáscar nació, realidad, bajo el nombre de Tupic Cusi Hualpa, 388 años antes prestarle sus generales de ley al monitor que se dibuja de memoria cada 8 de octubre. Huáscar es un vocablo quechua derivado de waskhar, que significa cadena de oro. Es un museo vivo en Talcahuano, Chile. Y es un símbolo de los 200 años de historia republicana del Perú.
Por todo eso, es un rompecabezas. La firma peruana Easyshop Import (según su cuenta oficial en Facebook) ha decidido cumplir el sueño electoral, a escala: desde el último 3 de abril puso a la venta un armable de 176 piezas del Glorioso Monitor.
(1) La frase exacta en la campaña de Yonhy Lescano fue: “Si soy elegido presidente, oficialmente voy a pedir que Chile devuelva el monitor Huáscar”.
LEE: Lolo Fernández: cuánto medirá, de qué estará hecha y cuándo se devela la nueva estatua del ídolo en el Monumental
MIRA: El arquero peruano que atajaba sin guantes, recibía 10 dólares de viáticos y fue campeón de la Copa América 1975
***
El domingo 14 de julio del 2013, la periodista Marisol Grau publicó una nota que muy probablemente empezó a escribir desde niña. El título en la web de El Comercio tiene la brevedad de un Tratado de Paz: “Descendientes de Miguel Grau y Arturo Prat conversaron en el Huáscar”. La fotografía, en cambio, es cálida, inspiradora, como si la cubierta del monitor que peleó en el Combate de Angamos fuera la sala de una casa durante un reencuentro de familia. Era ella, Marisol, tataranieta del Caballero de los Mares, quien visitaba por primera vez el buque que comandó su tatarabuelo durante la Guerra del Pacífico. Su cómplice fue María de la Luz Prat, bisnieta del héroe naval chileno.
Se nota que hace frío y está lejos de casa.
Se nota, también, que es una visita esperada, como regalo de Navidad. “Soy hija de Miguel Grau Umlauff —empieza la crónica—. Pero también soy hermana, tía, sobrina y prima de Miguel. He crecido rodeada por Miguel Grau: estaban en las navidades, en cumpleaños o en almuerzos por el Día del Padre. Antes de pisar las aulas conocí al Gran Almirante en lo cotidiano. Cuando llegaba al departamento de mi ‘papapa’ Rafael, en Miraflores, y al lado de la puerta de entrada, custodiándola, encontraba la espada que había llevado Grau en el Huáscar, reposando en una urna bajo un enorme retrato. De niña, aquello era más fascinante que cualquier clase de historia”.
Siete años después de ese viaje, ahora el Huáscar puede llegar a casa por delivery.
LEE: Descendientes de Miguel Grau y Arturo Prat conversaron en el Huáscar
***
Una muy amable contestadora responde sobre los requisitos para poder adquirir, en tiempos de pandemia, lo que podría ser un juguete más didáctico que cualquier site en Google. Buenas noches, Rompecabezas 3D Monitor Huascar para arma. Precio 89 soles. Material: Foam y espuma gruesa prepintada. No necesita recortar o pegar. Piezas: 176. Para algunos distritos la entrega es gratis.
Quienes aprendimos a mirar el mar en los días de guardia de un padre submarinista, o sabemos de memoria el Himno a Grau desde el Liceo, sabemos que esta pieza de museo no tiene precio.
VIDEO RECOMENDADO
Así se ve el monitor Huáscar en forma de rompecabeza