Si hay algo que Gian Piero Díaz rescata de estos días de pandemia son dos cosas: pasar más tiempo con su familia y explorar nuevas formas de entretener. Luego de que en un principio se suspendiera ‘Esto es guerra’, el programa que conduce, se dio tiempo para sentarse y darle vuelta a varias ideas. Una de ellas es una película que cocina con el director Jesús Álvarez. La otra ya saltó a los fogones: acaba de estrenar 'Fanáticos de la cocina’, un espacio por YouTube donde demuestra sus habilidades culinarias. “Es un tema que descubrí cuando viajé a México a los veinte años para estudiar actuación. Estaba solo y tuve que aprender a cocinar por un tema de subsistencia”, comenta el actor y conductor de tv.
¿Cómo te agarró esta crisis sanitaria?
Inicialmente el programa no siguió por un tema de seguridad. Así que me enfoqué en lo mío, a trabajar desde casa. Eso me daba la posibilidad de estar más cerca de los chicos. Esta cuarentena nos ha ayudado a abrir los ojos a muchas cosas que tal vez teníamos al frente nuestro y no nos dábamos cuenta. El día a día era tan inmediato, tan rápido, que no te tomabas la molestia de parar un segundo, respirar hondo y fijarte de dónde estás parado, qué estás haciendo, para qué lo estás haciendo. Yo siempre he sido muy pegado a mi familia, a mis hijos. Entonces la cuarentena ha sido la ocasión perfecta para hacer lo que más me gusta, que es estar en mi casa, compartir con ellos.
MIRA: Luis Horna: “Tengo una relación de amor y odio con practicar tenis”
¿Cambió mucho tu dinámica familiar?
Debo decir que tengo la suerte de estar casado con una profesora de educación inicial. Es una maravilla. Aprendo mucho al lado de Borka, mi esposa. Todo se hace mucho más sencillo. Nos hemos ordenado a partir de entender qué es lo más importante para los chicos. Emma va a cumplir nueve años, ella vuela sola ahorita. Es súper organizada. Mateo es chiquito. Tiene cuatro años. Ahí es más complicado. El adaptarse a nueva situación siempre cuesta, pero finalmente uno va encontrando los caminos para que todo sea más llevadero.
¿Es muy complicado ser papá en estos tiempos?
La paternidad te enseña un amor a primera vista súper fuerte, pero antes que nada mucha responsabilidad. No es fácil, exige muchos sacrificios. Lo que me interesa es que sean buenas personas, que no sean indiferentes ante las cosas que pasan. Que entiendan, por ejemplo, que debemos vivir en una sociedad con igualdad de género. Yo por eso a mis hijos les inculco las mismas responsabilidades dentro de casa. Justo con la gente de Metro hemos empezado a trabajar estos temas, con quienes tengo muchas coincidencias.
¿Y cómo ha sido tu relación con el mundo exterior?
Ha sido medio traumático ver cómo lo que antes era normal, hoy no lo es. El contacto con las personas cambió por completo. Tienes que enfrentarte a esa nueva normalidad, que es dura, complicada. Las relaciones entre las personas se han digitalizado, que es algo que particularmente a mí no me gusta. Esto que antes era una manera de hacer amigos, es casi una obligación en el trabajo, en la comunicación del día a día, en la forma que te comunicas con tu familia. Antes mi papá no sabía que era un whatsapp. Hoy la videollamada es la única posibilidad de ver a sus nietos.
MIRA: Magdyel Ugaz: "Denunciar acoso y agresión sexual es un acto de impresionante valentía
¿Qué tal se han manejado las cosas en el canal?
Felizmente el canal es amplio, no te cruzas con nadie. Hay todo un protocolo de seguridad, por dónde debes entrar, de lavado de manos, toma de temperatura, etc. Pero, para mí, lo más importante que todo es que sepas qué puedes y qué no puedes hacer. Que uno mismo se cuide. Si tu ere consciente del cuidado, es probable que no te pase nada. Si relajas las medidas, pues las cosas se complican. Los chicos en el programa lo han entendido bien. Aunque no lo parezca, el 90% de ellos son cabeza de familia. Entonces tienen que ser responsables. Si uno falla, fallamos todos.
En su momento, ¿te costó pasar de cable a señal abierta?
Sí, de hecho se nota la diferencia. Es enorme. La relación con el público cambia. La televisión abierta no solo te da mayor exposición, también mayores preocupaciones. En el que cable es un tema cualitativo, tienes garantizado televidentes según los sunoscriptores del canal de cable. Cuando comenzamos en ATV hicimos ‘Dame que te doy’, una especie de 2 a 4, y fue una primera patinada. Nunca funcionó. Nos sacaron a las dos semanas del aire.
¿La popularidad no te llega a abrumar?
El único momento en el que me puede llegar hasta fastidiar, no molestar, es cuando traspasan los límites de mi vida familiar. A veces hay personas que por ahí quieren sacarles fotos a mis hijos para compartirla en sus redes o qué se yo, y eso particularmente no me gusta. Los menores de edad, fundamentalmente, no elijen ser conocidos. Las redes pueden ser útiles para muchas cosas, pero muy peligrosas para otras. Hazlo con tu trabajo, pero con los chicos no sabemos a dónde va parar esa comunicación.
¿Cómo te manejas con las redes?
Comparto mi trabajo, mis experiencias, mí día a día en el programa. No hay nada que sea parte de mi intimidad. Eso me lo guardo. Es una opinión, respeto si otros los hacen.
¿Y cómo tomas las críticas que recibe ‘Esto es guerra’?
Los comentarios buenos y malos los licuo y saco un promedio de algo. Todo el mundo tiene la libertad de opinar, siempre habrá opiniones negativas o positivas, y te podrán gustar o no. En mi caso, siempre hay un espacio para la autocrítica, nadie es perfecto. Pero tampoco hay que satanizar un programa donde la gente se divierte y ha ido encausándose hacia un formato súper limpio, donde lo que se muestra es una competencia. Los chicos han ido entendiendo que tienen una responsabilidad mayor. Y que esos millones de likes lo pueden convertir en muchas positivas.
Finalmente, ¿cuál dirías que es el secreto de tu vigencia de quince años en la conducción de programas?
La televisión, número uno, es un trabajo como cualquiera. No eres ni más ni menos por eso. Lamentablemente te puedes marear. Y cuando uno se marea, se cae. Para mí lo más importante es tener los pies sobre la tierra y estar rodeado de gente que te lo recuerde, que te haga ver qué es lo importante. El día en que creas que tu trabajo es mejor que el de a lado solo por salir en tv, estás jodido. //