Un aficionado a la tecnología, con sentido el humor (y mucho tiempo libre) elaboró el que seguramente será uno de los disfraces más audaces y envidiables de Halloween. Este aficionado a los vehículos aéreos no tripulados, conocidos también como drones, se sirvió de todo su ingenio para recrear a un fantasma que casi parece real.
El hombre vistió al drone con una túnica blanca, le dibujó un rostro y le iluminó unos falsos ojos dándole una apariencia verosímil, al menos para quienes creen en fantasmas. Con la indumentaria lista, el toque de credibilidad lo termina de aportar el drone capaz de volar a media altura y espantar a más de una despistado.
“No puedo esperar a que llegue Halloween”, escribió Alton Porter en YouTube, donde su video tiene miles de visitas y comentarios celebrando su ingenio.