(Foto: EFE)
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Redacción EC

La vida sin es normal en China. Alrededor de 1.4 mil millones de chinos se despiertan diariamente para revisar WeChat en lugar de Gmail, navegar con Baidu en lugar de y ver videos en Youku en lugar de YouTube.

¿Pero el resto del mundo querrá comprar teléfonos que usen solo estas alternativas chinas?

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Bajo una lista negra de administración de Trump, Huawei tendrá que persuadir a los consumidores para que lo hagan, o reducir y limitarse al mercado chino.

Asimismo, Huawei quedaría aislada de hardware crucial como chips, procesadores y módems de Qualcomm, Intel y otras compañías estadounidenses.

Sin embargo, Huawei tiene suficientes reservas para mantener a la compañía en funcionamiento durante varios meses. Su filial HiSilicon también diseña y suministra chips para teléfonos inteligentes de Huawei, aunque los expertos de la industria dicen que sus chips no están a la par con los de EE.UU.

El presidente de HiSilicon, He Tingbo, escribió una carta a su personal el viernes diciendo que la empresa ha estado desarrollando chips de respaldo durante años en caso de que se haya desarrollado un "escenario extremo" como este, y ayudaría a que Huawei sea autosuficiente.

Por otro lado, Google aseguró a los usuarios de Huawei en Twitter el lunes que los teléfonos existentes retendrían el acceso a Google Play. Pero los teléfonos futuros perderán el acceso a la tienda Google Play, a aplicaciones como , Gmail y YouTube, y a las actualizaciones del sistema operativo Android.

Pero si Google pierde el mercado de Huawei, y potencialmente el de otras empresas chinas, también amenazaría el negocio global de Android.

Por ello, Huawei había estado desarrollando su propio sistema operativo, pero los voceros de la compañía señalaron que prefirieron usar Android.

La idea de un teléfono inteligente sin Google puede parecer absurda para los consumidores occidentales.

China ya tiene el 43 por ciento del mercado mundial de teléfonos inteligentes, una potencia significativa.

Se predice que incluso si la guerra comercial terminara y se retiraran las prohibiciones a Huawei, las compañías tecnológicas chinas construirían un sistema operativo alternativo dentro de los próximos cinco años, para que puedan depender menos de las inestables cadenas de suministro extranjeras.

Esto cambiaría por completo el mercado de teléfonos inteligentes y abriría las puertas a otras alternativas que se presentarán en China o en cualquier otro lugar.

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