FIONA GRAHAM BBC
Parece que estás escribiendo un artículo. ¿Puedo ayudarte? Esas palabras nos recuerdan a uno de los individuos más divisivos en el software: Clipo, el ayudante que Microsoft introdujo en su suite de Office en 1997.
El entusiasta asistente creado con un clip animado provocó en los usuarios un efusivo odio casi universal.
La compañía se rindió a lo inevitable en 2003 y envió a Clipo permanentemente al cesto de basura.
Pero a pesar del desagrado que provocó, la herramienta tuvo muy poco efecto en la imparable marcha de Office hacia los hogares y oficinas del mundo.
Hoy, uno de cada siete de nosotros, en total 1.000 millones de personas, usamos Office, ya sea en casa o en el trabajo.
Es un negocio de US$24.000 millones que representa casi 35% de los ingresos de Microsoft.
El hombre que está a cargo es Kurt DelBene, y es un desafío que obviamente disfruta.
No se tiene un trabajo como el mío o personas como las de mi equipo si uno no se siente entusiasmado cada día sobre lo que le depara el futuro a la gente y cómo la gente puede expresarse a sí misma dice.
EL UBICUO CHIP Office ha estado presente desde 1989 y originalmente estaba compuesto de Word, la aplicación de hoja de cálculo Excel y el padre de un millón de presentaciones de oficina, PowerPoint.
Desde entonces se ha ido expandiendo y ahora incluye al cliente de correo electrónico Outlook, OneNote para tomar notas, el servicio de mensajería instantánea Lync y mucho más.
Las actuales versiones son Office 2013 y Office 365, el servicio de suscripción de computación en la nube.
Eso no quiere decir que Microsoft no tenga otros competidores que están intentando robarle la corona. Los especialistas empresariales como Cisco y SAP, las opciones de código abierto como OpenOffice y, sobre todo, las aplicaciones de Google, un servicio basado en la nube que lo hace accesible desde la mayoría de los dispositivos y cuyo nivel básico es gratuito.
De manera que ¿llevar a Office a la nube fue una reacción ante la competencia de Google y otras aplicaciones?
En realidad no tanto dice DelBene. Fuimos adonde pensamos que la industria se estaba dirigiendo.
Creo que tendemos a pensar en términos de oportunidades en lugar de amenazas. Cuando se trata de un ambiente competitivo, eso te obliga a hacer tu mejor trabajo. Y eso mejora tus capacidades. Respeto a nuestra competencia pero creo que nosotros tenemos una perspectiva diferente.
Ofrecer un software por medio de suscripciones en lugar de vender un paquete al consumidor es una práctica cada vez más común y un modelo que DelBene piensa se mantendrá.
Esto no significa que el modelo contará con la aprobación permanente del consumidor.
Cuando Office 2013 fue lanzada a principios de este año la compañía fue duramente criticada.
Los que deseaban comprar el software descubrieron que sólo podían instalarlo en una sola computadora. Y cuando la máquina moría, Office moría con ella.
Muchos sintieron que se les estaba presionando para que se adhirieran al modelo de suscripción. La compañía rápidamente dio marcha atrás.
Cambiamos esa práctica porque los consumidores nos comentaron que no estaba siendo bien recibida dice el presidente de Office.
Continuaremos ofreciendo las versiones perpetuas de nuestros productos siempre que haya demanda para ellos.
Sin embargo, mantiene que la mayoría de los consumidores ya se suscribieron al servicio para tener acceso a actualizaciones regulares.
La versión casera de Office te deja instalar el programa hasta en cinco computadoras, y hay un plan de distintos precios para la versión empresarial.
Pero si el usuario cancela su suscripción, después de una serie de advertencias sólo te dejará leer documentos, y no editarlos ni crearlos.
FUTURO Microsoft lanzó su propia tableta en 2012, la Surface. Pero para los seguidores de Apple, Office no está disponible todavía para iPad ni otros sistemas operativos móviles.
Y por ahora, dice Kurt DelBene, es poco probable que eso cambie.
Lo que veremos será una continua inversión en aplicaciones web para poder trabajar bien con un iPad y trabajar bien con una tableta Android, etc..
Pero en lo que respecta al futuro, prefiere no especular.
Hasta ahora no hemos anunciado nada dice.
Algunos han criticado a la compañía de cometer lo que llaman un costoso error táctico, y apuntan a las decepcionantes ventas de la Surface.
Todavía queda por ver si la Surface podrá ponerse al día, o si los usuarios de iPad dejarán de usar Office.
En cuanto al futuro, DelBene se está centrando en un mejor manejo de datos.
Vivimos en una red de información y en cierto sentido yo debería ser capaz de usar esa red más eficientemente para comenzar un proceso de autoría y poderme expresar, al tiempo que avanzo, dice.
También ve un cambio en los tipos de dispositivos que usaremos en el trabajo.
Creo que la interfaz natural que utiliza tacto y voz continuará siendo importante. Pienso que rápidamente seremos capaces de poder mantener una reunión sin que todos estemos en el mismo cuarto pero que a la vez sintamos que todos estamos allí presentes. Y todo con ayuda de unas cuantas cámaras baratas que puedan colocar tu imagen en la reunión como si realmente estuvieras allí.
Y en cuanto a Clipo, las cosas parecen estar mejorando.
Después de que cayó en desgracia en 2003, fue resucitado como intrépido protagonista de Ribbon Hero 2, un juego de Microsoft diseñado para enseñar Office a los usuarios.