¿Qué hace que un smartwatch sea considerado de alta gama? El precio es un buen indicador, pero más allá de eso existen características que lo hacen pertenecer a este selecto círculo. Recientemente tuve en mis manos –mejor dicho, en mi muñeca– el reloj inteligente más avanzado de Xiaomi para la región, me refiero al Xiaomi Watch 2 Pro. Tras un mes de uso puedo contarte por qué este modelo tiene el título de ‘más avanzado’.
Si alguna vez has estado interesado en adquirir un smartwatch sabrás que en el mercado hay una infinidad de modelos de diversas marcas y con distintos precios. Los hay desde los más económico hasta los que valen incluso miles de soles. Evidentemente, la gran diferencia de precios no responde a un capricho de las marcas, sino a la tecnología que ofrecen y al material del que están hechos.
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Hablemos del diseño
En el caso del Xiaomi Watch 2 Pro notamos a primera vista que está dirigido al sector premium. Basta con observar el empaque donde viene el reloj para darse cuenta de que la firma asiática ha puesto mucho cuidado en la estética y los detalles. Es sobrio, pero resalta dos detalles muy importantes sobre los que luego repararemos con más detalle: su procesador Snapdragon y su sistema operativo, Wear OS de Google.
Una vez abierto encontramos el reloj, la base de carga –sin cargador– y el manual de usuario. ¿Y cómo es el diseño del reloj? Nuevamente, resalta el estilo premium. Sin demasiado adorno, el dispositivo transmite sobriedad y elegancia. La caja del reloj es de acero inoxidable mayormente liso, pero con los bordes inferiores de la circunferencia de la pantalla texturizados.
No podemos decir que el diseño es minimalista al 100%, pero trata de ser bastante limpio. Y no es minimalista porque en el lateral derecho aloja tres botones de tamaño considerable. En el centro está la corona, que no es solo un objeto decorativo, por el contrario, sirve de botón para ingresar al menú y, además, sirve para navegar por la interfaz cuando lo deslizamos. Tanto arriba como debajo de la corona hay botones. El primero es un acceso directo al modo de entrenamiento, mientras que el de abajo permite acceder a la última aplicación utilizada o, si se presiona dos veces, nos lleva a Google Wallet, aunque vale decir que esta acción puede configurarse.
Dependiendo del modelo, podemos tener un diseño negro con correas de caucho fluorado del mismo color o un diseño cromado con correas de cuero marrones. En mi caso, probé este último. Lo bueno es que las correas son intercambiables con cualquiera de su tipo (las de 22 centímetros).
La diagonal de la pantalla es de 1,43 pulgadas –47.6 milímetros–, un volumen considerable. Estamos ante un reloj de dimensiones grandes, por lo tanto, algo pesado, aunque uno se llega acostumbrar rápidamente.
Pantalla nítida
Una de las grandes diferencias entre un reloj clásico, sea analógico o digital, y uno inteligente es la pantalla. Los smartwatches no dan solamente la hora, todo lo contrario, tienen un sinnúmero de funciones. Y esta piza también sirve para diferenciar a un modelo de gama alta con uno de gama baja, pues permite ejecutar muchísimas más funciones. Más adelante hablaremos sobres estas capacidades, ya que en este apartado nos referiremos específicamente a la calidad de la pantalla.
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Tenemos tecnología AMOLED, 1,43 pulgadas y resolución de 466 x 466 píxeles. Asimismo, encontramos una capacidad de 600 nits. ¿Cómo se traduce todo esto en cristiano? Un gran nivel de detalle en las imágenes, es decir, no se ven “pixeleadas”. La calidad es tan buena que incluso podemos reproducir videos de YouTube y verlos con total nitidez y colores vívidos.
Otro punto importante a señalar: la sensibilidad de la pantalla es bastante buena. Los que utilizan smartwatches saben lo frustrante que puede ser presionar sobre algún ícono de la pantalla y no tener respuesta o que se trabe, eso no pasa en el Watch 2 Pro, y se agradece.
Para decir que estamos ante pantalla de calidad existe otro factor a calificar: el brillo. El inicio del año nos ha regalando unos días extremadamente soleados y, más allá del sofocante calor que padecemos, la intensa iluminación puede dificultarnos ver las pantallas de nuestros equipos electrónicos cuando estamos en lugares abiertos. Las compañías intentan solucionar este detalle aplicando un buen brillo, aunque a veces no es suficiente. El Watch 2 Pro cuenta con 600 nits y la opción de brillo adaptativo, para adecuar su intensidad automáticamente según nos encontremos con más o menos luz. En mi experiencia, la calidad de brillo del reloj es correcta, aunque a veces queda algo corta para los días que tenemos.
Un punto final que no quiero dejar de resaltar es que el reloj tiene la función ‘Always on display’, para que la pantalla siempre esté encendida y mostrando la hora. Se trata de una versión previa –y mucho más minimalista– de la pantalla principal, que se activa cuando dejamos de usar el reloj y, evidentemente, está hecha para ahorrar batería. De todas maneras, esta opción es opcional y configurable.
Sistema operativo de Google: un smartphone en mano
El reloj inteligente de Xiaomi viene integrado con Wear OS, el sistema operativo de Google, lo que nos brinda bastante ventajas, como la posibilidad de descargar un sinnúmero de aplicaciones, además de las que ya tenemos instaladas por defecto.
La interfaz es bastante amigable e intuitiva. Con la corona, como mencionamos anteriormente, podemos navegar a través de los distintos menús.
¿Qué aplicaciones tenemos? Las de toda la vida, por su puesto, como las de entrenamiento o las de salud, con análisis detallado de la actividad corporal, frecuencia cardiaca, SpO2, sueño e incluso la composición corporal. Aquí hay que hacer una pausa y explicar que, si bien casi todos los samartwatch de hoy vienen con estas funciones, mientras los más básicos ofrecen una medición no tan precisa, los de gama alta son más exactos, ya sea para medir los pasos, para monitorear las rutinas de ejercicio, las calorías quemadas como para las pulsaciones, las horas de sueño, etc.
Por otro lado, el reloj cuenta con algunas aplicaciones nativas de Google como Google maps, Google Play o Google Wallet.
Estas dos últimas, a mi parecer, marcan la diferencia. Google Play, porque es la tienda de aplicación de donde podemos descargar una infinidad de otras apps, entre ellas, Spotify, WhatsApp, Telegram, incluso algunas para ver videos, entre otras. Y Google Wallet, ya que nos permite realizar pagos directamente desde el reloj, sin necesidad de sacar el teléfono, la tarjeta ni los billetes. ¿No es algo peligroso si te roban el dispositivo? Sí, pero al menos podemos añadir un PIN de seguridad, de tal manera que cada vez que nos sacamos el reloj de la mano para volverlo a utilizar hay que ingresar dicho PIN.
Demás está decir que, descargando la aplicación de WhatsApp, podemos responder mensajes con texto y emojis. También podemos ver notificaciones del sistema o de otras aplicaciones como yape, plin u otras.
Con todas estas funciones, prácticamente, es como llevar un smartphone en la mano. Y todo es posible en gran parte gracias a su procesador, el Snapdragon W5+, el más moderno de Qualcomm para wearables. Al igual que con los celulares, en los relojes inteligentes esta pieza es determinante a la hora de ponerlo a prueba en el ‘multitask’, es decir, cuando ejecutamos varias tareas a la vez. Por ejemplo, a la hora de hacer ejercicio, mientras la aplicación de entrenamiento esta corriendo, bien podemos realizar otras tares como contestar mensajes o realizar llamadas sin que se ralentice.
Acompañan al procesador un sistema de 2GB de memoria RAM y 32 GB de almacenamiento interno.
No obstante, vale destacar que nada es perfecto. En el mes de uso que le he dado, en algunas ocasiones me he topado con cierta lentitud en el sistema, a la hora de abrir el menú o alguna aplicación en concreto. Aunque han sido ocasiones contadas, y eso que le he dado un uso intenso, por lo general se desenvuelve bien.
Para un mejor funcionamiento hay que descargar la aplicación Mi Fitness de Xiaomi. Es una app sencilla de utilizar y desde la cual tendremos acceso tanto a los datos de salud que registra el reloj como a los de entrenamiento. Además, desde allí podemos también realizar algunos ajustes, por ejemplo, cambiar las esferas de la pantalla.
La mala noticia es que, el Watch 2 Pro no es compatible con iOS, lo que quiere decir que si tenemos un iPhone no podremos vincularlo, ya que solo es compatible con Android.
Batería de corta duración, pero rápida carga
Nos encontramos con el talón de Aquiles del equipo. Su batería es de 495 mAh. He tenido la oportunidad de probar otros relojes que llegan a durar casi dos semanas con una carga; sin embargo, no tenían tantas funciones como el Watch 2 Pro.
Claro, tanta potencia tenía que pasar factura. Y si bien, como usuarios podemos realizar ciertos ajustes en la configuración para alargar la autonomía, el promedio de uso es de un día y medio. Al menos para mí, es poco tiempo. Tampoco es un drama, es verdad que cargamos nuestros celulares todos los días… pero justamente ese es el problema. Mientras dispositivos tengamos, más pesado se hace tener que estar pendiente de cargarlos, si no es el reloj, es el celular, los audífonos o la tablet.
No obstante, no todo es tan malo. Xiaomi ha compensado la baja autonomía con una carga bastante rápida. Con poco más de 30 minutos le reloj llena el 100% de su batería. Con apenas 5 minutos, el 22% y con 20 minutos, algo del 70%.
¿Vale la pena el Xiaomi Watch 2 Pro? Esto dependerá, como siempre, de lo que se está buscando. Si estamos interesados en adquirir un producto de gama alta, con gran potencia para correr muchas aplicaciones y que tenga múltiples funciones, como hacer pagos desde el celular o ver videos, entonces este reloj será una buena opción. El precio de este equipo es de aproximadamente S/ 1.099, lo que lo hace competitivo en este segmento frente a otros modelos. Le veredicto: buen procesador, buen sistema operativo. Lo malo es la autonomía, aunque compensa la carga rápida.
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