
A punto de cumplir 89 años, el escritor peruano Mario Vargas Llosa viene recorriendo distintos lugares de Lima que fueron escenarios clave para sus obras.
En muchas ocasiones acompañado por su hijo Álvaro, el Nobel de Literatura estuvo en sitios como el desaparecido bar La Catedral, en la segunda cuadra de la avenida Alfonso Ugarte, en el Centro de Lima.

Así como en el Colegio Militar Leoncio Prado, donde estudió e inspiró su éxito ‘La ciudad y los perros’. Recientemente, ha visitado el Penal de San Juan de Lurigancho y algunos sitios emblemáticos de Barrios Altos como las Cinco Esquinas y la Quinta Heeren.
De ese modo, alejado del bullicio mediático, al que estuvo expuesto por muchos años, el literato ha regresado a distintos sitios, pero siguiendo una estrategia que le permite no generar aglomeraciones, ceremonias o cualquier otra situación que le disguste.
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¿Cuál es la estrategia de Mario Vargas Llosa para pasar desapercibido?
De acuerdo con Álvaro Vargas Llosa, hijo del célebre y notable escritor peruano, los paseos que realizan son hechos con discreción, sorpresivos y en lugares donde no haya demasiado flujo de personas.
“Lo hacemos con discreción, sorpresa, buscando el momento y lugar con menos gente, siempre de improviso”, escribió el académico en su cuenta de X, antes conocida como Twitter, en respuesta al comentario de un seguidor.
Tras ello, agregó con esas previsiones no generan que multitudes de fanáticos, medios de comunicación o autoridades los encuentren, cumpliendo el deseo del Nobel.
“Sin dar tiempo a nada: ni entusiasmos, ni aglomeraciones, ni -menos aún- ceremonia o solemnidad alguna. Es lo que dicta el momento y su voluntad (y la nuestra)”.
En 2024, el hijo del escritor reveló que su padre se alejaría de los reflectores debido a su avanzada edad, y que limitaría sus apariciones públicas. Actualmente, Mario Vargas Llosa se encuentra en Lima disfrutando de una vida familiar y privada.
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¿A qué lugares de Lima volvió Mario Vargas Llosa?
En octubre de 2024, el escritor también asistió al Teatro Marsano para una función privada de la adaptación teatral de ‘¿Quién mató a Palomino Molero?‘, dirigida por Edgar Saba y producida por Makhy Arana.
En noviembre de 2024, visitó el Colegio Militar Leoncio Prado, donde estudió y que sirvió como base para “La ciudad y los perros” (1963).
También recorrió el antiguo Bar La Catedral, ubicado en la avenida Alfonso Ugarte, que fue inmortalizado en “Conversación en La Catedral” (1969).
A inicios de 2025, se le vio en el jirón Huatica, que en los años 50 fue el barrio rojo de Lima y que aparece en varias de sus historias, además de visitar el penal de San Juan de Lurigancho, escenario clave de “Historia de Mayta”.
Y más recientemente, el martes 25 de marzo, el escritor regresó a Barrios Altos para visitar el famoso barrio de Cinco Esquinas, la casa del compositor criollo Felipe Pinglo Alva (aunque no pudo acceder) y la emblemática Quinta Heeren.
Mario Vargas Llosa cumplirá 89 años el 28 de marzo y se espera que lo celebre en su hogar de Lima junto a su familia.
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