Toma nota: cinco consejos para ahorrar dinero en Europa

MARÍA PÍA BARRIENTOS @pia_barrientos Redacción online

Planeas el viaje de tus sueños. ¿El destino? El Viejo continente. Sin embargo, tras gastar una gran suma en pasajes y después de hacer algunas cuentas, reparas en que tu presupuesto para disfrutar de las maravillas de Europa es, de plano, bastante escueto. Tranquilo, aquí te damos algunas claves que te permitirán ahorrar algunos billetes y sacarle el máximo provecho a tu estancia por esta maravillosa tierra. Toma nota.

1. COMPRA LOS PASAJES A TIEMPO Aprovecha las ofertas. Las líneas aéreas suelen ofrecer interesantes promociones para viajar a Europa, sin embargo, solo podrás gozar de ellas si es que compras tu pasaje con algunos meses de antelación.

La forma más económica y práctica de viajar por el continente probablemente es a través de las líneas de bajo coste (como Ryan Air, EasyJet o Vueling, entre otras). Hazlo con tiempo para no pagar de más. Para saltar de ciudad en ciudad el tren es también una opción rápida y bastante cómoda.

2. NO VAYAS EN TAXI En Europa tomar taxi es casi un lujo. Lo mejor es utilizar el transporte público, excelente en la mayor parte de ciudades. Apenas llegues al lugar, hazte de un mapa del metro local. Con él podrás ubicarte y saber qué líneas tomar para poder desplazarte a los lugares de tu interés. Otra cosa, es mejor comprar billetes semanales o que permitan unos 10 o más viajes. Por ejemplo, en Madrid este último cuesta unos 12 euros, mientras la tarifa es de 1.50 euros por cada viaje y 3 si es que este es combinado (es decir, si tomas más de una línea en tu recorrido).

3. PARA QUEDARSE Múltiples hoteles ofrecen ofertas si es que uno hace su reserva y cancela su estadía por Internet. En páginas como RyanairHotels.com, Kayak o Tripadvisor podrás encontrar múltiples opciones. Si vas en grupo, una muy buena opción es alquilar un departamento, además de ser más cómodo lograrás ahorrar algún dinero. Puedes hallar cientos de alternativas en portales como Airbnb o HomeAway#.

Por otro lado, los hostels son muy buenas alternativas, eso sí, si es que no tienes problemas en compartir tu habitación con algunos desconocidos. Pero si deseas quedarte en un lugar de lujo y de todas formas pagar un poco menos por ello, puedes utilizar Blink, una aplicación que te da la opción de acceder por una tarifa reducida a múltiples hoteles. Pero eso sí, has de hacer tu reserva a último momento.

4. SÍ A LOS TOURS GRATUITOS Para conocer la historia y los puntos de interés más representativos una de las mejores formas es asistir a un tour y este no tiene por qué ser muy caro. Últimamente en Europa un puñado de empresas ofrecen caminatas gratuitas por la ciudad. Claro, tras acabar el recorrido, el guía te pedirá que califiques tú mismo el servicio y que le des lo que tu voluntad dicte.

La empresa Sandemans New Europe ofrece este servicio por más de 18 ciudades europeas, como Madrid, Barcelona, Berlín, París, entre otras. City Free Tours ofrece recorridos por Amsterdam y París, mientras Wild Walkers Tours hace lo propio por Lisboa y Oporto.

5. LAS MÁS GRANDES ATRACCIONES SIN PAGAR NADA Existen museos, castillos, monumentos, entre otros, cuya visita es ineludible. La mayor parte cobra varios euros por entrar, sin embargo, muchos de ellos ofrecen también acceso gratuito en determinados días u horarios.

Por ejemplo, visitar el Museo del Prado de lunes a sábado entre las 6 y las 8 de la noche (o los domingos de 5 a 7) no te costará nada. Lo mismo ocurrirá si acudes al Palacio Real de Madrid los miércoles y jueves entre las 5 y las 8 p.m. Si quieres entrar gratis al Louvre y al Palacio de Versalles, puedes hacerlo los primeros domingos de cada mes. Infórmate antes de acudir al lugar de tu interés.

Ten en cuenta además que muchas de estas atracciones no les cobran a los menores de 18 años, a los estudiantes y algunos también a los periodistas (como el Museo del Prado). Asimismo, se aplican algunos descuentos para los menores de 26 años y los mayores de 60. Para obtener estas facilidades tendrás que portar tu pasaporte, DNI y/o credencial de estudiante.

Y tú, ¿qué otro consejo incluirías?