Además de sus impresionantes paisajes naturales, los lugares elegidos en esta selección se caracterizan por contar con una serie de elementos que los hacen especiales: desde un rico legado histórico conservado en perfecto estado, hasta espacios que se constituyen como algunos de los más ricos en biodiversidad del planeta.
PACAYA SAMIRIA: TODO UN LUJO Para quienes quieran conocer la selva y sus alrededores con todas las comodidades imaginables, le recomendamos hacerlo en un crucero cinco estrellas con todo incluido. Algunas de las compañías más emblemáticas que operan en el mercado local son Aqua Expeditions, Delfín Amazon Cruises e International Expeditions.
Aunque le suene inverosímil, estas empresas le ofrecen al pasajero una experiencia única alrededor de la reserva Pacaya Samiria de cinco y cuatro noches sin calor y sin mosquitos. Esto debido a que cuentan con aire acondicionado y mosquiteros en todos sus ambientes, los cuales no tienen nada que envidiar a un hotel de lujo.
Otra característica de estos barcos es que todas sus suites cuentan con servicio personalizado, así como terraza y vista exterior para que el pasajero no se pierda en ningún momento de los bellos escenarios que lo rodean.
La empresa Aqua pone especial énfasis en la gastronomía. Prueba de ello es que el chef ejecutivo de la empresa sea Pedro Miguel Schiaffino, quien ha elaborado un menú especial con insumos selváticos para deleite de los pasajeros.
Delfín engríe a sus huéspedes con masajes en una terraza privada para relajarse con la paz de la selva o con la oportunidad de disfrutar de un jacuzzi con aire acondicionado en un ambiente especial.
Otra ventaja de estos cruceros son las excursiones que realizan por la selva con guías especializados. Hay mágicos paseos al amanecer, caminatas diurnas e incluso búsqueda de especies endémicas durante la noche. Así descubrirá la impresionante variedad de flora y fauna de esta reserva natural, como los delfines rosados.
Si lo que prefiere es conocer la selva de un modo más tradicional, visite los hoteles Inkaterra Reserva Amazónica o Hacienda Concepción, los cuales ofrecen tours por diferentes rincones de la selva.
CHACHAPOYAS: ENTRE LAS NUBES Debido a su particular ubicación geográfica, el significado de su nombre no podía ser otro: ‘bosque de niebla’. Esta es una localidad que cuenta no solo con un legado muy rico en cuanto a patrimonio arqueológico, cultural e histórico, sino también natural.
Su buque insignia es la imponente fortaleza de Kuélap, ubicada a 70 km. de la ciudad, en la cima de una montaña que domina el valle. Esta impresionante construcción en piedra cuenta con 600 metros de largo y muros que alcanzan los 20 metros de alto.
En su interior se ubican más de 400 casas circulares que se mantienen en muy buen estado a varios siglos de su construcción.
El valle que lo rodea pertenece a un ecosistema de transición entre los Andes y la Amazonía, motivo por el cual se pueden apreciar decenas de aves endémicas, así como plantas locales.
Mención especial merece la impresionante catarata de Gocta, que con más de 700 metros de altura está dentro del grupo de las cinco caídas de agua más altas del planeta.
Al llegar a Chachapoyas lo que busca la mayoría de viajeros es visitar los sarcófagos de Karajía (en Cruzpata). Se hacían de barro y alcanzaban los 2,50 metros de altura. Fueron colocados en lugares inaccesibles para evitar la profanación de sus momias.
Otro punto imperdible de la región son las cavernas de Quiocta, las cuales se ubican a 15 minutos de Lamud y a dos horas de Chachapoyas. Dentro miles de estalactitas y estalacmitas forman impresionantes esculturas naturales de varios metros que nos dan la sensación de encontrarnos en otro planeta.
En Santo Tomás de Aquino se encuentran los singulares complejos funerarios de Révash. Son construcciones rojizas que sobresalen de las paredes rocosas del Utcubamba. Otros atractivos a tener en cuenta son la laguna de los Cóndores, así como el Museo de Leymebamba.
Entre los hoteles que destacan en la región tenemos el Casa Andina, ubicado en una remozada hacienda colonial rodeada de campos y con todas las comodidades; y el Gocta Lodge, que tiene privilegiadas vistas de esta caída de agua.
PUNO Y SUS PAISAJES INOLVIDABLES La leyenda cuenta que el origen del Tahuantinsuyo tuvo como punto de partida el lago Titicaca, un espectacular espejo de agua en cuyos alrededores encontramos hasta hoy una rica herencia en cuanto a chullpas y construcciones incas.
Una ruta recomendable para arribar a Puno y poco empleada por los turistas locales es la que se puede hacer por tren desde Cusco. Es un hermoso tramo de diez horas por el que se recorren pintorescos pueblos, como Oropesa, Cusipata, Andahuaylillas, Urcos y Marangani.
También se pueden ver algunas construcciones de gran importancia, como la gran portada de Rumicolca y los restos del gran templo de Viracocha, el dios creador en la mitología Inca, considerado por algunos como la edificación techada más grande construida por los incas.
Este servicio es prestado por la empresa PerúRail en su tren Andean Explorer, el cual cuenta con todas las comodidades, así como espectáculos durante el viaje.
Una vez en Puno el abanico de opciones es amplio. A tan solo 34 km. del centro se encuentra uno de sus mayores atractivos: Sillustani, un complejo arqueológico conformado por chullpas de 12 metros de altura a los pies del lago Umayo y que invitan a tomar fotos dignas de una postal.
Las opciones más solicitadas son las que incluyen las islas de los alrededores. A estas se arriba en lanchas y en la mayoría los pobladores han adecuado viviendas para que los visitantes puedan pernoctar.
Algunas de las más visitadas son las islas de Uros, que están hechas de totora, una planta que usan para todo: fabrican sus casas y utensilios. También figuran Taquile, Amantaní y las que forman parte de la península de Capachica, en las cuales los visitantes pueden participar en jornadas de cultivo, recolección y pesca con los moradores.
Para quienes buscan la máxima comodidad y atención personalizada figuran hospedajes como el Titilaka, ubicado en una isla privada a 40 minutos del centro de Puno, así como el Casa Andina Isla Suasi, el cual está enclavado en la isla del mismo nombre, un mágico lugar en el que se conjuga naturaleza con una atención personalizada. Ambos hoteles son una muy buena opción para quienes buscan relax y atención personalizada.
TAMBOPATA: CONSERVANDO CAMINOS En Madre de Dios un grupo de personas se llenaron de esperanza y empezaron a contagiar a todos de un virus llamado conservación. Protegen bosques, educan, limpian ríos y viven de lo que la tierra les da. A menos de cinco minutos de la ciudad se inicia el Corredor Ecoturístico Tambopata, donde muchas familias vieron en la conservación una forma de vida.
- Ecoaldea Kapievi (km 1.5). Pierina Zlatar dejó la ciudad para formar una villa que promueve el uso de plantas medicinales, el yoga y la meditación.
- Refugio K’erenda Homet (km 3,7). Víctor Zambrano es un líder de la conservación que viene reforestando más de 20.000 mil árboles y tiene uno de los bosques mejor conservados de la zona.
- Botafogo (km 7,5). Lo que fue un pastizal hoy, gracias a Ronald, es uno de los lugares más concurridos del corredor. En verano se abre una imperdible playa de arena suave delante de su predio.
- La Habana Rural Inn (Km 9). El profesor Herbert Lobón dejó las aulas para dedicarse a su bosque. Tiene un jardín botánico de especies nativas, plantas medicinales y frutales. Es el único que tiene piscina y un mirador para observar aves.
- Inotawa. Esta iniciativa de la familia Delucchi no se encuentra dentro del corredor pero ayuda al desarrollo turístico de la zona. Para llegar debe viajar en bote hasta la Comunidad La Torre.
- Arbio. Tati Espinosa y Michel Saini tienen una concesión de conservación. La pareja, preocupada en el cuidado y conservación del planeta, ofrece paquetes turísticos que incluyen la visita y la ayuda a las distintas iniciativas de conservación en el Corredor Ecoturístico Tambopata.