A veces solemos despertarnos con un intenso dolor de cabeza o de cuello y no sabemos cuál es la razón. También puede aparecer una molestia en la mandíbula, acompañada de un sonido particular al abrirla. Estas dolencias tendría un orígen algo desconocido para la mayoría de nosotras: el bruxismo.
Este mal es bastante común y los especialistas lo definen como el rechinar de los dientes de manera inconsciente y no funcional. Este fenómeno involuntario se da frecuentemente en las horas de sueño, aunque también puede presentarse durante el día.
Puede tener dos causas: la primera tiene que ver con la inestabilidad oclusal o el hecho de que los dientes de arriba y abajo no calcen entre sí; la segunda -y principal según los odontólogos-, es el estrés emocional que influye en la función y actividad muscular generando mayor tonicidad en la boca.
“Incluso se pueden generar situaciones bastante severas. Hay pacientes que desgastan sus dientes de tal manera que el tercio inferior del rostro, donde se origina la nariz hasta el mentón, se ve perjudicado. Y eso estéticamente se ve muy feo, porque da una imagen de vejez y el mentón se va hacia adelante”, explica la dentista Daniela Heran al diario El Mercurio.
La especialista recomienda utilizar el conocido plano de relajación oclusar para relajar la musculatura y proteger los dientes de una posible fractura. No obstante, recalca que este debe ser recetado por un odontólogo y no debe comprarse en una farmacia cualquiera, ya que cada persona requiere un tratamiento individual.