Al dirigente de la región Chechenia, Ramzan Kadyrov, le gusta la cámara. Y es curioso: así como el líder checheno propuso abiertamente utilizar armas nucleares para que termine de invadir , antes también pidió a sus millones de seguidores en que lo ayudaran a encontrar a su gato perdido. En las redes sociales, el hombre que lidera con puño de hierro a ese territorio no duda en mostrar su musculatura, rutinas de ejercicio o dejarse ver mientras reza.

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La televisión también es uno de sus medios favoritos. En el 2016, Kadyrov -nacido el 5 de octubre de 1976 en la República Autónoma Socialista Soviética de Chechenia e Ingusetia- su versión de “El aprendiz”, reality para encontrar a su nuevo asistente. Claro que para trabajar con el extremista hay que tener ciertas aptitudes que, según las promociones del show, consistían en “sobrellevar cualquier dificultad y dar vida a los proyectos más interesantes junto al equipo del líder de la república”. No podría ser de otra forma: el líder llegó al poder gracias al presidente de Rusia, Vladimir Putin, y, desde entonces, se le de “torturar y hacer desaparecer a personas”, el ABC del autoritarismo.

¿Exagerado? No, Ramzan Kadyrov -quien a los homosexuales como “demonios” y preferiría que “se los lleven a Canadá para purificar [la] sangre” de su país- es un entusiasta de la guerra. Desde inicios de la invasión rusa hay reportes de soldados chechenos que luchan en Ucrania a favor de Moscú y que su papel en la toma de Mariúpol fue vital. No hay pruebas de lo último, pero el rumor sirve como buena propaganda.

Es difícil calibrar su importancia real para el desarrollo de la guerra, pero sí es claro que es el comandante de unas tropas brutales y aliado incondicional de Putin, al punto que él mismo se jacta de ser su ‘soldado’ —sostiene Enrique Banús, director del Instituto de Estudios Europeos de la Universidad de Piura—. Parece que está convencido de lo que dice y es lo suficientemente radical como para ofrecer que sus hijos vayan a la guerra”.

Ramzan Kadyrov es una figura polémica. (Foto: AFP)
Ramzan Kadyrov es una figura polémica. (Foto: AFP)
/ ALEXEY NIKOLSKY

En efecto, la semana pasada, Kadyrov que Akhmat (16 años) Eli (15) y Ada (14) estaban con un pie en Ucrania. Él declaró: “Ha llegado el tiempo [para ellos] de lucirse en una verdadera batalla, solo puedo apoyar su determinación. Pronto partirán en primera línea y estarán en las zonas más difíciles de la línea de contacto”.

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Su verdadera relevancia

Para Banús, el aporte de Ramzan Kadyrov también es simbólico. Hacia y durante la Segunda Guerra de Chechenia, él lucho junto a Moscú para eliminar a los disidentes. Luego, se hizo con el poder gracias al del Kremlin. “Es como si ahora devolviera el favor. Desde el punto de vista psicológico, es un muy buen vocero y cumple con el papel de ser la voz radical”.

El analista italiano Francesco Tucci coincide. “Los rusos lo utilizan para subir el tono del enfrentamiento, para mostrar que son moderados”. Y si ha vuelto con sus comentarios altisonantes es porque, dice el analista, “quiere retomar un rol protagónico”. Por el momento, lo consiguió: luego de pedir que Rusia usara armas nucleares, Vladimir Putin lo ascendió a coronel general.

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Kadyrov ha sido uno de los más fieles a Putin, pero en los últimos meses no ha logrado los objetivos que prometió y hasta quiso dar un paso al costado porque ya no goza con la confianza del presidente ruso. Ahora regresa, pero no hay que temer a sus declaraciones”.

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, mostró que mantiene su apoyo a Kadyrov, al ascenderlo esta semana a coronel general por su cumpleaños. (Foto: Getty Images)
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, mostró que mantiene su apoyo a Kadyrov, al ascenderlo esta semana a coronel general por su cumpleaños. (Foto: Getty Images)
/ Mikhail Svetlov

La sugerencia de Tucci tiene sentido. Finalmente, los comentarios de Kadyrov parecen siempre forzados. Valdría recordar lo que dijo al inicio de la guerra: “Me gustaría darle un consejo al actual presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, antes de que sea expresidente. Debería apurarse y llamar a nuestro presidente, el comandante en jefe, Vladimir Putin, y pedirle perdón”. El tiempo no le ha dado la razón; de hecho, demostró su error: el fin de semana, un camión explotó en el puente de Crimea y causó un incendió, en lo que parece haber sido un atentado orquestado por las fuerzas ucranianas. Poco después, Moscú le bajó el dedo a al general Alexandr Dvornikov y designó a Serguéi Surovikin como el comandante de la Agrupación Conjunta de Fuerzas que atacan Ucrania. Y parece que la tendencia se mantendrá.

Pero, a pesar de su poca influencia en la guerra, Kadyrov parece que seguirá siendo el hombre de Vladimir Putin en Chechenia. Finalmente, es la gran del presidente ruso, quien luego del atentado terrorista que mató a Akhmad Kadyrov (mayo del 2004), lo convirtió en primer ministro y espero a que cumpliera 30 años para, en el 2007, nombrarlo presidente.