Casi 500 millones de ciudadanos del norte de China vivirán en promedio cinco años menos que sus connacionales del sur debido a que el aire que respiran está más contaminado, determinó una investigación de un equipo integrado por expertos de China, Israel y EE.UU.
De acuerdo con el trabajo, la ya descontinuada política de entregar carbón gratis a los pobladores de las zonas frías de China contribuyó al deterioro de las condiciones ambientales y tiene un vínculo directo con enfermedades relacionadas con la contaminación.
Aunque el programa de combustible fósil para calefacción ya no se realiza, el legado se mantiene en muchos edificios que usan antiguos calderas que tienen que ser alimentadas por carbón.
El estudio aporta condiciones únicas para responder las preguntas acerca del impacto sobre la expectativa de vida porque la política alteró las concentraciones de contaminación en gente que debería tener condiciones de salud parecida, explicó Michael Greenstone, profesor del Instituto de Tecnología de Massachussets que participó en la investigación.
Según datos de la Comisión Europea para el Medio Ambiente, China es el principal emisor de CO2 del planeta y casi duplica en emisiones las de EE.UU. el segundo país que más polución genera.
A principios del año los chinos sufrieron una ola de contaminación en muchas ciudades de la que algunos culpan al acelerado proceso de industrialización del país.