HORACIO ZIMMERMANN @Horacon Redacción Online

Juan Manuel Vargas solía caminar por las calles de Florencia asediado por los elogios y la demostración de cariño de los hinchas de la Fiorentina. Todos vivían enamorados de su zurda. El peruano se había ganado la aceptación de los fanáticos a base de goles, asistencias, potencia y garra para jugar al fútbol. Nadie cuestionaba los quince millones de euros que se había pagado al Catania por su traspaso en 2008.

Las actuaciones de Vargas en el campo eran tan convincentes que llegó a ser uno de los tres indiscutidos en el equipo que dirigía Cesare Prandelli, actual entrenador de la selección italiana. “Junto a Adrian Mutu y Sebastian Frey, Vargas era de los mejores”, cuenta a elcomercio.pe Stefano Rossi, periodista italiano de “Violanews.com”, encargado de cubrir a diario los entrenamientos del equipo del Calcio italiano.

La salida de Prandelli de la dirección técnica del club parece haber determinado un antes y después en el rendimiento de Vargas. “Él subió de peso y atrajo la atención debido a sus hábitos nocturnos en la ciudad y no por sus actuaciones en el campo”, cuenta Rossi. Uno de los principales hechos que marcó el destino de Vargas, además, fue aquel accidente que sufrió a bordo de su auto Porsche en enero del 2011.

“Vargas causó una gran conmoción cuando no era parte del equipo debido a una lesión y luego tuviera un accidente a las seis de la mañana en su Porsche”, dice Rossi. Se presume que aquella mañana, el primo del futbolista manejó el auto sin licencia de conducir y en estado de ebriedad, según informó el diario La Repubblica de ese país. De hecho, el técnico Sinisa Mihajlovic aseguró que el peruano no había tenido un comportamiento profesional serio.

EL PRESENTE DEL ‘LOCO’ Lo que vino después del accidente fue malo para el volante peruano. La zurda ya no era la misma, la potencia que dejó en ridículo a Battaglia previo al gol de Fano ante Argentina no apareció más, producto de ello fue cedido a préstamo al Génova. Allí logró salvar el descenso en las últimas fechas; sin embargo, el ‘Loco’ jugó poco durante la temporada debido a constantes lesiones.

Luego de culminarse el préstamo volvió a Fiorentina, equipo al que pertenece. Vargas dejó atrás los kilos de más y ahora muestra un mejor estado físico, sin embargo, el club mantiene la idea de venderlo. De hecho, hasta hace poco lo tenía entrenando solo junto a un preparador físico. Recién hace una semana se integró al grupo. Aun así, la institución morada continúa en busca de un comprador.

“Hace unas semanas fue parte el tour que realizó Fiorentina en España y Portugal. Vargas jugó unos minutos ante el Sporting de Lisboa. La razón de su inclusión la determinaron los dirigentes del club con el objetivo de mostrarlo y llegue alguna oferta por él. Aquí se sabe que Montella (el actual entrenador) no lo tiene en sus planes porque considera que ya no volverá a ser el mismo de antes”, explica a elcomercio.pe Stefano Rossi desde Italia.

Hace dos días sucedió algo que Vargas nunca imaginó: la hinchada que tanto cariño le daba, lo pifió cuando fue presentado ante 25 mil personas. Hoy el ‘Loco’ no vive un buen momento en el país europeo. “Fiorentina le ha prohibido declarar a la prensa. Si no lo ha vendido aún es porque él no ha jugado bien en los últimos dos años”, dice Rossi, y agrega la otra razón por la cual el equipo quiere deshacerse de él: su alto salario.

Si bien el futbolista fue presentado en el equipo, esto no implica que vaya a ser tomado en cuenta por el entrenador. Su no inclusión en la lista de jugadores para disputar la Europa League lo explica todo. Vargas cambió de look, su estado físico, pero esto no parece ser suficiente para convencer a la Fiorentina que debe hacer uso de él. Sin embargo, a ciencia cierta, si existe un culpable de su momento, ese es Juan Manuel. Bien lo dijo Markarián, su técnico en la selección: “Él está pagando los errores que cometió en el pasado”.