En marzo, Anthony Bourdain, uno de los cocineros y conductores de televisión más famosos del mundo, recorrió el Perú como parte de su búsqueda para llegar al origen del que su amigo, Eric Ripert, le comentó que era “el mejor chocolate del mundo”. El viaje se resumió en el penúltimo capítulo de la actual temporada de “Parts Unknown”, programa que se transmitió el domingo 2 de junio por CNN.
La finalidad del viaje de Bourdain al Perú no era probar su cocina, la cual ya conocía y a la cual ya había calificado como una de las más “infravaloradas del mundo”. Su objetivo era ubicar una cepa de chocolate blanco puro, considerada una de las más raras del mundo.
“Buscamos un tipo de cacao pensado casi extinto. Hace unos años, los árboles de los valles del Marañón fueron probados genéticamente en Estados Unidos y se determinó que tenían un ADN igual a uno de los cacaos más raros del mundo”, contó en su programa.
Se trata de la variedad Nacional Puro, que crece en Jaén y que fue rebautizada con el nombre de Fortunato 4. Este chocolate es usado para productos que distribuye la empresa Éclat Chocolate. El mismo Bourdain plantó cacao, el cual fue usado para crear 7 mil unidades de “Good Evil” que costaban US$18.
¿Y LOS AGRICULTORES? La principal motivación del trotamundos era, además, ver cómo vivían los agricultores que se encargaban de extraer el cacao. Según explicó en el programa, alrededor del 50% de la ganancia de sus chocolates se lo llevaron los retailers.
Bourdain llevó a cabo esta misión junto al chef Eric Ripert y Chris Curtin, maestro chocolatero de Éclat Chocolate. Con ellos conoció a la familia de don Fortunato, quienes extraen el cacao allá en Jaén y quienes le contaron que ahora viven más tranquilos tras la llegada del cacao blanco, luego de pasar épocas de escasez.
“¿Hicimos lo correcto? ¿Está bien que dos neoyorquinos ganen dinero del trabajo de granjeros a los lejos? Fortunato, Edilberto (alcalde del lugar) Chris, todos en la línea de producción, se ven bastante felices, pero, ¿quiero estar en la industria del chocolate? Eso es algo que tendré que averiguar”, fue la conclusión del programa.
Bourdain, en su blog personal, reconoció que sus dudas sobre la “moral” detrás del chocolate de lujo no fueron de su total satisfacción, y esperó que el programa sirva para “pintar un cuadro completo, o uno más completo, de una de las comidas favoritas en todo el mundo”.