Adam Rieger se dio cuenta de que muchos de los clientes que acudían al Smitty's en el que trabaja de las comunidades indígenas circundantes hablaban cree. Quería encontrar una forma de superar esa brecha cultural. (Foto: Adam Rieger | CBC News)
Adam Rieger se dio cuenta de que muchos de los clientes que acudían al Smitty's en el que trabaja de las comunidades indígenas circundantes hablaban cree. Quería encontrar una forma de superar esa brecha cultural. (Foto: Adam Rieger | CBC News)
Oscar Guerrero Tello

La barrera del idioma a menudo dificulta la comunicación, especialmente entre diferentes culturas. Sin embargo, a veces un simple gesto puede marcar la diferencia. Eso fue lo que ocurrió en un restaurante de Prince Albert, Saskatchewan, Canadá, cuando un camarero decidió actuar de manera inesperada para comunicarse con un grupo de clientes indígenas. Su acción rompió las barreras lingüísticas y conquistó a todos.

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Todo empezó cuando Adam Rieger encontró difícil establecer una conexión con los clientes indígenas en el restaurante Smitty’s, donde trabaja. Se dio cuenta de que muchos de los clientes provenientes de las comunidades circundantes hablaban cree, una lengua indígena hablada en Canadá por 96.000 personas. Así que Rieger puso manos a la obra y decidió buscar una manera de superar esa barrera cultural.

Decidió aprender algunas palabras en Cree y pedir ayuda a los clientes que hablaban el idioma. “La gente se ponía a hablar y se emocionaba de inmediato”, dijo Rieger a . “Así que, cuando vi esa reacción inicial, pensé: ‘vamos a llevar esto hasta el final y seguir aprendiendo para ver hasta dónde puedo llegar’”, agregó.

Adam Rieger llena la taza de café de un cliente. (Foto: Adam Rieger | CBC News)
Adam Rieger llena la taza de café de un cliente. (Foto: Adam Rieger | CBC News)

Rieger dijo que algunos hablantes de Cree se sorprenden cuando los saluda en ese idioma, pero aprecian sus esfuerzos. “Ha sido realmente hermoso, honestamente”, dijo Rieger.

Natasha Wolfe fue a almorzar con una amiga durante su descanso en la Universidad de las Primeras Naciones de Canadá. Mientras estaba en el restaurante, notó que un camarero hablaba en cree con un cliente. Sorprendida, le preguntó a su amiga si realmente estaba hablando cree. Tras observarlo un momento, Wolfe se dio cuenta de que el camarero le comentó que estaba intentando aprender la lengua.

Wolfe le preguntó su nombre y si podía tomarle una foto para compartirla en sus redes sociales. Dijo que estaba impresionada por la iniciativa de Rieger de aprender el idioma cree y que quería compartir su historia con otras personas. La reacción de la gente a su publicación ha sido positiva y alentadora.

Adam Rieger se ríe con un cliente en el Smitty's donde trabaja. (Foto: Adam Rieger | CBC News)
Adam Rieger se ríe con un cliente en el Smitty's donde trabaja. (Foto: Adam Rieger | CBC News)

“Me quedé impactada. Probablemente, más que nada, me quedé atónita”, dijo Wolfe. “Inmediatamente sentí admiración por él y por su compromiso de hacerlo. Su disposición fue bastante interesante”.

Rieger ha ido más allá de aprender solo unas palabras en cree; ahora utiliza YouTube para estudiar con Simon Bird, un hablante fluido. Aunque su nivel de Cree es básico y enfrenta desafíos, como aprender el lenguaje escrito y el alfabeto, sigue motivado para seguir aprendiendo.

A pesar de las dificultades, las nuevas interacciones con los clientes lo han ayudado a lidiar con el estrés de su trabajo como camarero, haciendo que ir a trabajar sea más fácil. Después de nueve meses en Smitty’s, Rieger asegura que su perspectiva cambió al ver las reacciones positivas de los clientes, sintiendo que ahora su propósito es conectar con la gente y mostrarles su aprecio.

SOBRE EL AUTOR

Periodista. Estudió Comunicación en la Universidad de Lima. Diez años de experiencia en medios digitales. Actualmente se desempeña como redactor del Núcleo de Audiencias de El Comercio.

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