En 2011, Kerry Swinton contraía matrimonio con su novio y, entonces, Mark Taylor se acercó para saludar a los recién casados. Sus vidas siguieron sus propios caminos hasta que 4 años después el destino los juntó y desde esa fecha han sido inseparables, protagonizando una tierna historia de amor que lo ha superado todo.
Kerry vive en el Reino Unido y contó a South West News Service sus impresiones sobre el hombre que, en un comienzo, jamás pensó sería el más importante de su vida: “pensé que era amable, pero nunca imaginé que terminaría siendo el amor de mi vida con uno de mis órganos”.
La mujer de ahora 46 años cuenta que su matrimonio no duró pues, tras tener un hijo se divorciaron en 2015 empezando una nueva vida como soltera, pero optando en concentrarse en sí misma: “me lancé al trabajo y también decidí retomar el piano, así que compré uno antiguo y asequible en Facebook Marketplace”.
El reencuentro con Mark
Sin embargo, necesitaba alguien con fuerza y con un automóvil para ayudarla a trasladarlo; en eso, por esos caprichos que tiene la vida, se topó en Internet con el servicio de mudanzas de Taylor. Le pidió el trabajo, este aceptó y lo entregó unos días después: “tuvimos una agradable conversación... hablamos sobre las relaciones y mencionó que estaba saliendo con alguien”.
“Siempre me gustó, pero nunca pensé que estaba soltero”, confesó Kerry. Una semana después se acercó a ella comenzando a hablar casi todos los días hasta que se animó a invitarla a salir llevando flores a su casa: “me di cuenta de inmediato que me enamoraría de él”.
Donar es amor
Luego de algunos años saliendo decidieron vivir juntos, pero en 2021 la salud de Taylor se complicó producto de un trastorno genético que condujo a una enfermedad renal poliquística, desarrollando quistes dentro de los riñones, donde estos se agrandan y, con el tiempo, pierden su función.
Ese mismo año, Taylor es trasladado de urgencia al Hospital Queen Elizabeth tras una incontrolable hemorragia nasal. Luego de darle su diagnóstico lo pusieron en la máquina de diálisis.
Kerry no estaba dispuesta a dejar ir a Mark, por lo que se ofreció para donarle su riñón, previamente se hizo una prueba de compatibilidad: “las posibilidades eran muy escasas”, pero cuando el resultado fue positivo, él lloró de emoción.
“Sabía del riesgo que estaba tomando para salvarme”, recordó Mark quien fue sometido a una operación de 4 horas que fue exitosa: “Nunca pensé que alguna vez donaría un riñón. Es muy surrealista, pero vi cuánto afectaba su vida cotidiana. Apenas podía caminar sin sentir dolor”.
Juntos otra vez y pensando en el futuro juntos
Pasaron seis largos meses de recuperación en casa juntos: “ella me está dando otra oportunidad en la vida. Nunca pensé que entregar un piano me daría un riñón”, dijo el hombre de 52 años.
Superada esta prueba de fuego, la pareja mira al futuro y tiene planes de matrimonio para el 2024: “nunca pensé que el hombre que conocí en mi boda sería la pareja perfecta. Él tenía mi corazón y ahora tiene mi riñón”, sentenció.
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