Anne y Mark no pararon hasta convertirse en padres. (Imagen captura: ABC13Houston / YouTube)
Anne y Mark no pararon hasta convertirse en padres. (Imagen captura: ABC13Houston / YouTube)
Redacción Mag

Los milagros existen. Anne Briggs-Cheng y Mark se casaron hace algunos años. Si bien les dijeron que no tendrían hijos, trataron de seguir adelante y tiempo después, para su enorme sorpresa, supieron que iban a tener un bebé. De pronto, la felicidad se transformó en pesadilla cuando se enteraron que la vida de la criatura corría peligro. A través de la , contaron su conmovedora .

Anne y Mark se conocieron mediante Internet en mayo de 2019. A pesar de vivir en diferentes partes de China, se enamoraron y decidieron contraer matrimonio en junio de 2020 (Taiwán). A partir de ahí, ambos comenzaron su lucha por convertirse en padres; tal y como informó .

El camino lleno de obstáculos

Desde un inicio, la mujer no ocultó ningún secreto a su amado y conversó sobre la posibilidad de aumentar la familia. “Casi 12 años que no había tenido un ciclo menstrual”, confesó la esposa. Sin pensarlo dos veces, Anne Briggs-Cheng y Mark intentaron tener un bebé juntos con la fecundación in vitro (FIV).

Sin embargo, las cosas no salieron como esperaban y justo antes del Día de la Madre (2021) el procedimiento falló. “Fue un punto bastante bajo la primavera pasada de solo lidiar con parte de esa decepción”, confesó Anne.

Queda embarazada de milagro

Pasaron los meses y la pareja recibió una noticia totalmente inesperada mientras visitaba a su familia en Maine (Estados Unidos): la fémina descubrió que estaba embarazada de forma natural. “Estábamos tan impresionados. Pensamos ‘¿Cómo es esto posible?’”, recordó Mark.

En poco tiempo, la felicidad de los futuros padres cambió drásticamente, pues supieron a las 20 semanas de embarazo que el bebé desarrolló derrame pleural e hidropesía. Es decir, los pulmones de la criatura tenían grandes cantidades de líquido.

Anne Briggs-Cheng y Mark con la prueba al saber que serán padres de forma natural. (Imagen captura: ABC13Houston / YouTube)
Anne Briggs-Cheng y Mark con la prueba al saber que serán padres de forma natural. (Imagen captura: ABC13Houston / YouTube)

Aunque los médicos propusieron “simplemente interrumpir el embarazo”, Anne se sometió a dos tratamientos para drenar el líquido, pero resultaron fallidos. Frente a esta situación complicada, una amiga de la infancia y ginecóloga les recomendó al Dr. Ramesha Papanna, especialista en embarazos de alto riesgo.

Operación con final feliz

De inmediato, Papanna se reunió con la pareja. Luego de la charla, el doctor consiguió localizar en Canadá un dispositivo para colocarlo en el pecho del feto. “A veces puede suceder porque algo más está pasando. Insuficiencia cardíaca en el bebé y bebé anémico”, señaló Ramesha sobre el estado del bebé.

Sabiendo que su criatura podría no sobrevivir al trayecto, Mark y Anne viajaron de Taiwán a Houston el día de Navidad para empezar el procedimiento. Afortunadamente, la cirugía, realizada el 26 de diciembre, “salió muy bien”.

Anne Briggs-Cheng y Mark con su recién nacida. (Imagen captura: ABC13Houston / YouTube)
Anne Briggs-Cheng y Mark con su recién nacida. (Imagen captura: ABC13Houston / YouTube)

“Fue un procedimiento de dos minutos, y eso fue todo lo que tomó”, explicó Papanna. Anne estuvo bajo el cuidado médico durante tres meses hasta que por fin dio a luz el 18 de marzo. Ahora, la palabra “Esperanza” es el segundo nombre de la pequeña Abigail.

Qué es la fecundación in vitro

La fecundación in vitro (FIV) es una técnica compleja por la cual se logra la fecundación de los ovocitos por espermatozoides fuera del cuerpo de la madre. Es el principal tratamiento para la esterilidad cuando otros métodos de reproducción no han tenido éxito.

El óvulo fecundado (cigoto) puede entonces ser transferido al de la mujer, en vistas a que implante en el útero y continúe su desarrollo hasta el parto.