En 2019, Rocky Elardo recibió, quizás, la peor noticia de su vida: fue diagnosticada con un mortal cáncer que amenazaba su existencia, pero 4 años después, la hoy muchacha de 17 años es toda una sobreviviente y el destino le vuelve a sonreír al convertirse en una de las estrellas en el equipo de baloncesto de su escuela, por lo que su historia de superación no tardó nada para aterrizar en las redes sociales y hacerse viral.
Rocky estudia en el Heritage High School de Leesburg, Virginia, Estados Unidos y, recientemente, fue quien marcó el punto de oro para que su equipo se impusiera a los rivales de Rock Ridge High School: “en realidad, estaba muy estresada... a veces, cuando lanzas la pelota, la forma en que sale de tus dedos, puedes sentirla, como se sintiera bien”, recuerda así la joven sus sensaciones a Good Morning America.
El video muestra a la multitud aplaudiendo a más no poder, no solo por encestar esos tres puntos de la victoria, sino porque saben de la lucha de nuestra protagonista, a quien en 2019 le detectaron un sarcoma de Ewing, que es una especie de tumor que afecta los huesos, los tejidos blandos del cuerpo.
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Batallando por su vida
“A pesar de todo el tratamiento y todas las citas con el médico y sin importar lo mal que se haya sentido en un día determinado, ha estado en cada práctica en los últimos cuatro años en los que puede estar físicamente, en cada juego con una perspectiva positiva, no solo en el juego sino en la vida”, comentó el entrenador asistente de Rocky, Ariel McKinney.
De acuerdo al Instituto Nacional del Cáncer, el sarcoma de Ewing es raro, pero cuando aparece lo hace, mayormente, entre adolescentes y adultos jóvenes de 20 años, por lo que la muchacha recibió una serie de tratamientos que mermaron su participación en el equipo de baloncesto.
La canasta de la salvación
“Hice quimioterapia en mi primer y segundo año, luego radiación en mi tercer año y luego me sometí a cirugías en mi primer y último año para extirpar el cáncer”, explicó, además de añadir que los médicos, al término de este periodo, le aseguraron que no había rastro del tumor, por lo que estuvo apta para jugar el 27 de enero, haciendo el lanzamiento del triunfo para su equipo.
McKinney resume de la mejor manera el espíritu luchador de Rocky Elardo: “ella es, simplemente, un ser humano increíble que nos ha inspirado a todos y en todas las formas posibles”, sentenció a Good Morning America.
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