Los hermanos Tsarnaev, sospechosos de haber perpetrado este lunes el atentado durante la maratón de Boston, no tienen nada que ver en la actualidad con Chechenia, informaron hoy las autoridades de la república norcaucasiana rusa.
Los individuos sospechosos de haber perpetrado el crimen en Boston no tienen ninguna relación con Chechenia, aseguró hoy Alvi Karímov, portavoz del líder chechén, Ramzán Kadírov, a la agencia rusa Interfax.
El funcionario explicó que la familia Tsarnaev hace muchos años que se trasladó de Chechenia a otra región.
Durante largo tiempo vivió en (la república centroasiática de) Kazajistán y desde allí emigraron a Estados Unidos, donde los miembros de la familia recibieron permiso de residencia, apuntó.
Por ello, agregó, los individuos de los que estamos hablando no vivieron en Chechenia cuando eran mayores y si se convirtieron en malos, pues esa pregunta habrá que hacérsela a los que les educaron.
HISTORIA FAMILIAR Según otras fuentes recogidas por las agencias de noticias rusas, los hermanos Tsarnáev, Dzhojar y Tamerlán, pertenecen a una familia chechena que procedería de otra república centroasiática, Kirguizistán, y emigraron a Estados Unidos en 2002.
Son una familia de refugiados de Kirguizistán. Dzhojar Tsarnaev estudió con nosotros el primer curso. Su hermano mayor, Tamerlán, también estuvo con nosotros durante un año, dijo a Interfax Temirmagomed Dabudov, director de la escuela Número 1 de Majachkalá, la capital de Daguestán, república vecina de Chechenia, en el Cáucaso norte ruso, donde habrían vivido también.
El director agregó: Si recuerdo bien, tenían dos hermanas y abandonaron la república en 2002.
En 2001 (Dzhojar) estudió el primer curso. Cursó un año y después se fue a Estados Unidos, precisó otra fuente a la agencia oficial rusa RIA-Nóvosti.
CHECHENIA Chechenia, escenario de dos cruentas guerras entre el Ejército federal ruso y la guerrilla separatista, ha recuperado durante los últimos años la estabilidad gracias al despliegue de un gran dispositivo policial.
En cambio, terroristas de origen chechén han perpetrado graves atentados en territorio ruso como los ataques suicidas contra el metro de Moscú (marzo de 2010) y el aeropuerto de Domodédovo (enero de 2011), en los que murieron 40 y 37 personas, respectivamente.