Una corte egipcia estableció el miércoles el 4 de noviembre como fecha para el juicio del depuesto presidente islamista Mohamed Mursi y otros importantes líderes de los Hermanos Musulmanes por incitar a la violencia.

Mursi está retenido en un lugar secreto desde que fue derrocado a principios de julio. Si aparece ante el tribunal, será su primera comparecencia pública desde entonces.

El juicio podría inflamar aún más las tensiones entre el movimiento islamista y el Gobierno apoyado por las Fuerzas Armadas, así como profundizar la inestabilidad política que ha hundido el turismo y la inversión en el país árabe más poblado.

El juez Nabil Saleeb dijo que Mursi y los dirigentes de los Hermanos Musulmanes han sido acusados de incitar a la matanza y tortura de manifestantes frente al palacio (presidencial de) Etihadeya.

Los cargos se refieren a las muertes de alrededor de una docena de personas en los violentos enfrentamientos que tuvieron lugar fuera del palacio presidencial en diciembre del año pasado, después de que Mursi enfureciera a los manifestantes con un decreto que expandía sus poderes.

INESTABILIDAD Egipto lleva inmerso en una situación de inestabilidad desde que el Ejército depuso a Mursi tras unas manifestaciones masivas contra su Gobierno y luego lanzó una dura represión contra los Hermanos Musulmanes, matando a centenares de personas en acampadas de protestas y arrestando a otras 2.000.

Hoy miércoles, el ministro de Solidaridad Social, Ahmed al Baree, disolvió al grupo islamista:https://elcomercio.pe/actualidad/1642262/noticia-egipto-gobierno-retiro-hermanos-musulmanes-registro-como-ong obedeciendo una orden judicial, dijo un portavoz, que añadió que los Hermanos utilizaron sus sedes para almacenar armas. El grupo ha negado las acusaciones.