En seis entidades de Estados Unidos se desarrollarán sitios de prueba para aviones no tripulados o drones, anunció el lunes la Administración Federal de Aviación, un paso vital para el desarrollo de ese tipo navegación aérea en el país.
Los estados de Alaska, Nevada, Nueva York, Dakota del Norte, Texas y Virginia serán las sedes de los sitios de investigación, informó la FAA (siglas en inglés de la agencia).
Los aviones no tripulados han sido usados principalmente por las fuerzas armadas, pero los gobiernos, negocios, agricultores y otros planean unirse al mercado. Muchas universidades han expandido sus programas de este tipo de aeronaves.
Estos sitios de prueba nos darán información valiosa sobre la forma más adecuada de usar esta tecnología avanzada en los cielos del país, afirmó en un comunicado el secretario de Transporte, Anthony Foxx.
LOS PROBARÁN EN CLIMAS DIVERSOS La FAA indicó que, para elegir los sitios de prueba, tomó en cuenta la geografía, el clima, la localización de la infraestructura en tierra, las necesidades de investigación, el uso del espacio aéreo, la experiencia en aviación y el riesgo.
En el caso de Alaska, la FAA señaló que hay un grupo diverso de sitios de prueba en siete zonas climáticas. El centro para Nueva York, ubicado en el aeropuerto internacional Griffiss, tratará de integrar los aviones no tripulados en el congestionado espacio aéreo del noreste de Estados Unidos.
El estado de Dakota del Norte ya ha asignado cinco millones de dólares para la iniciativa y nombró a un ex comandante de la Guardia Nacional Aérea como director del sitio de pruebas.
La FAA no permite el uso comercial de aviones no tripulados pero trabaja para que las directrices de operación estén listas a fines de 2015, aunque algunas autoridades admiten que el proyecto tal vez tarde más de lo esperado. La agencia cree que unos 7.500 aviones no tripulados pueden surcar los aires en un plazo de cinco años una vez que se les abra el acceso al espacio aéreo estadounidense.
La seguridad sigue siendo nuestra mayor prioridad a medida que integramos los sistemas no tripulados al espacio aéreo de Estados Unidos, dijo Michael Huerta, administrador de la FAA, en un comunicado. Hemos incorporado exitosamente nueva tecnología al sistema de aviación por más de 50 años, y no tengo dudas de que haremos lo mismo con la aviación no tripulada.
Un estudio encargado por el sector pronostica que se crearán 70.000 puestos de trabajo durante los tres primeros años posteriores a la eliminación de las restricciones a este tipo de aeronaves en los cielos de Estados Unidos. El mismo análisis estima que el salario de los operadores de esos aviones fluctuará entre 85.000 y 115.000 dólares.
Pero el sector enfrenta críticas tanto entre sectores conservadores como liberales.
Garantizar mayor acceso a los cielos de Estados Unidos permitirá que el país se acerque a ser una sociedad vigilada en la que cada movimiento es supervisado, seguido y escrutado por las autoridades, de acuerdo con un informe de la Asociación Nacional para la Defensa de los Derechos Civiles difundido en diciembre del año pasado.