Los temporales (fuertes lluvias y vientos) que azotaron Chile esta semana dejaron cinco muertos y 231 personas sin vivienda, informó hoy el gobierno de Sebastián Piñera.
La totalidad (de los fallecidos) fue por hipotermia y en la calle, lamentó el ministro de Desarrollo Social, Joaquín Lavín, quien habilitó diversos albergues para indigentes ante la emergencia.
El ministro, quien anticipó que las lluvias recrudecerán desde el viernes, confirmó además que el Estadio Víctor Jara seguirá operando como albergue y que ya está a su máxima capacidad.
VÍAS CERRADAS En paralelo, el director de la Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior (Onemi), Ricardo Toro, informó que aún están cerrados varios pasos fronterizos cordilleranos con Argentina.
Entre ellos, citó los cruces Los Libertadores, Pehuenche y Pino Hachado. Las lluvias, que obligaron a suspender clases a dos millones de estudiantes y dejaron a miles personas sin luz, permitieron atenuar la sequía que afecta el centro y sur del país desde hace cuatro años.