El presidente italiano Giorgio Napolitano se reunió hoy en el palacio Quirinale con los diez expertos que ha designado para buscar solución a la crisis de gobierno de su país. El mandatario aseguró que los dos grupos de trabajo que se formarán solo presentarán propuestas sin intervenir en decisiones políticas.
Napolitano decidó formar estos grupos de trabajo ante una situación de imposibilidad para proseguir en la búsqueda de una solución a la crisis de Gobierno, debido a la rigidez mostrada en las posturas de las principales fuerzas políticas, según sus palabras.
La crisis política de Italia comenzó después de que las elecciones parlamentarias en febrero no den mayoría ninguno de los grupos políticos, y tras el fracaso de los intentos de buscar consensos y formar gobierno.
PRESENTARÁN SOLUCIONES Los diez expertos elegidos formarán dos grupos de trabajo, el primero deberá señalar medidas económicas cruciales para reactivar el sector económico, en plena recesión y con un desempleo de cerca el 12%. La segunda comisión se encargará de cambiar la ley electoral, principal culpable de que el Parlamento esté bloqueado. Ambas delegaciones tienen un plazo de ocho a diez días para presentar los primeros resultados de su trabajo.
La comisión económica social está formada por el presidente del Instituto de Estadística, Enrico Giovannini, el presidente del ente garante para la competencia, Giovanni Pitruzzella, el miembro de la directiva del Banco de Italia, Salvatore Rossi, el diputado Giancarlo Giorgetti, el senador Filippo Bubbico, y el ministro de Asuntos Europeos en el Gobierno de Monti, Enzo Moavero Milanesi. La comisión jurídico institucional, por su parte, está formada por el presidente emérito del Tribunal Constitucional Valerio Onida, el senador Mario Mauro, de la coalición centrista de Monti, el senador Gaetano Quagliarello, del Pueblo de la Libertad de Silvio Berlusconi, y el profesor Luciano Violante, del Partido Demócrata.
La alianza de centro-derecha del ex primer ministro Silvio Berlusconi criticó la creación de los grupos de expertos, tachándola como una pérdida de tiempo, y pidió la convocatoria de nuevas elecciones. Por su parte, el Partido Demócrata de Pier Luigi Bersani, apoyó la solución de Napolitano, siempre que ésta dé paso a un Ejecutivo de cambio. El líder del Movimiento 5 Estrellas (M5S), Beppe Grillo, reiteró que no respaldará a ningún otro partido además del suyo en un eventual voto de investidura.