El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, afirmó hoy que el acuerdo alcanzado en Ginebra con Irán sobre su programa nuclear abre las puertas hacia un mundo más seguro, aunque dejó claro que se trata de un primer paso y advirtió de que la comunidad internacional seguirá vigilando a Teherán.
Hoy, Estados Unidos, junto con nuestros aliados y socios, dio un importante primer paso hacia una solución amplia que resuelva nuestras inquietudes respecto del programa nuclear de Irán, dijo Obama una comparecencia en la Casa Blanca tras el anuncio del acuerdo.
La diplomacia por la que apostaron Estados Unidos y los demás países negociadores (Rusia, China, Reino Unido, Francia y Alemania) ha abierto un nuevo camino hacia un mundo más seguro, y en el que se puede verificar que Irán no se hace con un arma nuclear, agregó.
Está ahora en manos de Irán demostrar durante los próximos seis meses de vigencia del acuerdo que su compromiso es serio, lo cual le dará a Teherán la posibilidad de un nuevo comienzo con la comunidad internacional, agregó.
En este sentido, y en un mensaje claro al Congreso estadounidense al que en las últimas semanas la Casa Blanca tuvo que convencer arduamente para que no impusiera nuevas sanciones, Obama subrayó que ahora no es el momento para aprobar más sanciones porque ello haría descarrilar este prometedor primer paso.
*Eso sí, advirtió, el acuerdo aunque prevé un alivio modesto del impacto de las sanciones internacionales *deja sin embargo en pie la arquitectura o núcleo central de las mismas, con lo que si Irán no cumple el país persa verá un endurecimiento de las penalizaciones internacionales que conducirán a un mayor aislamiento.
En similares términos se expresó su secretario de Estado, John Kerry, quien la víspera había viajado de urgencia a Ginebra para ultimar el acuerdo. Este primer paso hace que el mundo sea más seguro. Ahora queda más trabajo, tuiteó desde la ciudad suiza.