Un día después de salir del hospital en el que se encontraba tras su rescate el lunes pasado, la confusión rodea hoy el paradero de Michelle Knight, una de las tres jóvenes secuestradas durante una década en Cleveland (Ohio) supuestamente por Ariel Castro.
Aunque algunos medios de comunicación en el extranjero han señalado que Knight se encuentra en la casa de Gina DeJesús, otra de las jóvenes liberadas el lunes tras casi una década de cautiverio, los portavoces de la familia DeJesús han negado esa información.
El hospital donde se encontraba hasta ayer emitió un comunicado en el que sólo confirmó que Michelle había sido dada de alta y que la joven pedía a los medios que respetasen su privacidad.
Michell fue la víctima que pasó más tiempo secuestrada por Castro y quien al parecer sufrió especialmente la violencia del acusado. Habría abortado hasta 5 veces y recibido golpes en el cuerpo, incluido el rostro. “Puede necesitar una reconstrucción facial”, afirmó su abuela, Deborah Knight. Fue mordida muchas veces, también en la cara y ha perdido parte de la audición, agregó.
Los rumores sobre el paradero de Michelle se dispararon ayer cuando su abuela, Deborah Knigth, se presentó en el domicilio de DeJesús. Deborah fue recibida en la puerta de la casa por la madre de Gina. Las dos mujeres se abrazaron y charlaron durante un rato, pero Deborah Knight no entró en el interior de la vivienda.
Según informaciones aparecidas en los últimos días, Michelle mantenía malas relaciones con su familia antes de su desaparición.
Su madre, Barbara, intentó ver a su hija el miércoles en el hospital pero al parecer Michelle se negó a permitir su visita.
La cadena de televisión ABC dijo ayer que Barbara Knight, quien ahora vive en Florida, ha contratado al abogado Jay Milano para tener acceso a su hija.