Luego de la esperada liberación de Amanda Berry (27), Gina DeJesus (23) y Michelle Knight, los misteriosos hermanos Castro entre 50 y 54 años y de origen puertorriqueño fueron arrestados por la Policía de Ohio.
Uno de ellos, el ex conductor de autobús escolar Ariel Castro, de 52 años, era el propietario de la casa, situada en un vecindario donde abundan las viviendas con las ventanas selladas con tablas de madera. Los otros son Pedro Castro, de 54, y Onil Castro, de 50.
Hasta el momento han presentado cargos formales contra ellos y hay más interrogantes que respuestas sobre su vida.
ARIEL CASTRO: VECINO AMABLE, FAMILIA EXTRAÑA Algunos vecinos, estupefactos, describieron a Castro como un conductor de autobús amable, músico, cuya hija iba a verlo de vez en cuando con sus hijos.
Según el diario Plain Dealer, la hija de Ariel, enferma mental, fue condenada en 2008 a 25 años de cárcel por violencia contra un bebe. El hijo de Ariel, por otro lado, había escrito un artículo acerca de un desaparecido en 2004, de acuerdo con el periódico USA Today, que sería una de la mujeres.
CBS News, citando a la familia, sostuvo que DeJesus una de las cautivas conocía a Ariel Castro, quien sería el padre de su mejor amigo.
VECINOS OLÍAN ALGO EXTRAÑO Sin embargo, dos vecinos dijeron haber estado lo suficientemente preocupados por lo que vieron en la casa como para llamar a la policía en dos ocasiones.
Elsie Cintrón, que vive a tres casas de distancia, dijo que su hija vio en una ocasión a una mujer desnuda que andaba a gatas en el jardín trasero hace varios años y llamó a la policía. Pero ellos no se lo tomaron en serio, afirmó.
Otro vecino, Israel Lugo, dijo que escuchó golpes en algunas de las puertas de la casa de Castro, que tenían bolsas de plástico en las ventanas en lugar de cristales, en noviembre de 2011. Lugo dijo que los agentes tocaron en la puerta principal, pero nadie respondió. Caminaron a un costado de la casa y luego se fueron, señaló.
Los vecinos también dijeron que a veces veían a Castro irse caminando con una niña pequeña a un área de juegos infantiles en el vecindario. Y Cintrón recordó que una vez vio a una niña pequeña que se asomaba por la ventana del ático de la casa.
FALTA DE ANTECEDENTES DELICTIVOS Las autoridades no informaron si las mujeres estaban atadas dentro de la casa o si alguna de ellas había sido violada. La policía indicó que intenta ser cuidadosa al interrogar a las mujeres, dado el trauma que soportaron.
Los investigadores también dijeron hoy que no tienen registros de ninguna pista o llamada que hubieran recibido para denunciar presuntas actividades delictivas dentro de la casa en los años posteriores a la desaparición de las víctimas, pero indicaron que aún están verificando sus registros.