El ex presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, fue acusado por abuso de debilidad en la investigación del caso de la multimillonaria Liliane Bettencourt por una supuesta financiación ilegal de la campaña que le permitió ganar las elecciones en 2007.

El ex mandatario, que hasta hoy tenía el estatus de “testigo asistido”, fue implicado por el juez de instrucción Jean-Michel Gentil, luego de participar en un careo en el que participaron al menos cuatro miembros del personal de la heredera del imperio de cosméticos L’Oréal, entre ellos su mayordomo, Pascal Bonnefoy.

La finalidad del careo era determinar cuántas veces visitó Sarkozy la casa de la multimillonaria durante su campaña, para así poder determinar si abusó de la debilidad de la octogenaria.

El abogado de Sarkozy, Thierry Herzog, aseguró para la agencia AFP que apelarán “inmediatamente” la inculpación, ya que es “incoherente en el plano jurídico e injusta”. Desde el inicio de la investigación, el gobierno y su defensa negaron todos los cargos.