El presidente de Rusia, Vladimir Putin, propuso hoy a los líderes del G-20 abordar durante la cena la situación en Siria, asunto que no estaba en la agenda de la cumbre.
Varios de los participantes me han pedido que se les dé la posibilidad de discutir otros temas muy importantes y graves de política internacional que no figuraban en un primer momento en nuestro plan, en particular, la situación en Siria, dijo el presidente ruso.
El jefe del Kremlin propuso abordar este asunto durante la cena que los mandatarios celebrarán tras la sesión plenaria para no alterar la agenda de las reuniones, que tienen lugar en el Palacio de Constantino de la localidad de Strelna, en las afueras de la antigua capital zarista.
OPOSICIÓN AL ATAQUE MILITAR Rusia y China se oponen categóricamente a una acción militar contra Siria que no cuente con el beneplácito del Consejo de Seguridad de la ONU y consideran que el Congreso estadounidense no tiene poder para autorizar un ataque contra Damasco.
Putin ha advertido que cualquier ataque que no cuente con el visto bueno de la ONU solo puede considerarse una agresión, mientras la Cancillería china afirmó hoy en ésta antigua capital imperial rusa que la guerra no es la solución a la crisis siria.
A FAVOR DE LAS ARMAS Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se propone recabar en San Petersburgo apoyo internacional para lanzar un ataque limitado contra Siria, en represalia por el supuesto uso de armas químicas por parte del régimen de Bachar al Asad contra la población civil.
Obama intenta ampliar una coalición que por el momento solo tiene el apoyo de Francia, Turquía, Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait y Dinamarca.