Formalizar la minería ¿Cómo vamos?, por César A. Ipenza

En diciembre prximo se cumplirn tres aos desde la declaratoria de guerra a la minera ilegal por el actual gobierno. Desde entonces, el caso ms visible y meditico Madre de Dios no tiene ningn minero formalizado, lo mismo que el resto de la Amazona. Los debates y las discusiones polticas van de aqu y all, pero en concreto la destruccin y los delitos asociados no se detienen.

Ante el cuestionamiento sobre el xito o fracaso de la formalizacin, quizs convenga comentar lo siguiente, a fin de mostrar con hechos que es lo que sucede:

1. Una de las razones de la imposible formalizacin en la Amazonia, concretamente en Madre de Dios, recae en que gran parte de las concesiones mineras estn superpuestas a concesiones forestales y no hay quien otorgue la autorizacin para el uso del terreno superficial. Lo mismo ocurre con las tierras no concesionadas. Por lo tanto, ante la ausencia de esta autoridad que otorgue la autorizacin del uso del terreno superficial, quienes buscan formalizar una operacin en una concesin minera no son admitidos a continuar con los procesos de formalizacin o saneamiento por las direcciones regionales de minera.

2. Los responsables de formalizar no son el MEM o el Minam, sino los gobiernos regionales, que no tienen recursos ni personal adecuado, y algunos de ellos incluso con intereses directos en la actividad. Casos concretos son los de Arequipa, que inicialmente tena cerca de 17.000 mil mineros por formalizar y 5 personas empleadas para toda esta labor.

3.Las acciones del Gobierno Central solo se han orientado a la interdiccin, y no a facilitar la formalizacin, que podra haberse dado de una manera mucho ms real mediante mayores procesos de asistencia tcnica y econmica y la facilitacin de mayor personal a las regiones, ni tampoco a la recuperacin de reas degradadas o a la identificacin de tecnologas apropiadas, como bien manda la ley. Pero en concreto hasta ahora no hay ningn plan aprobado para la recuperacin de reas destruidas (solo en Madre de Dios ms de 50.000 hectreas y en el resto del pas aproximadamente 150.000 hectreas).

4. Las medidas del Ejecutivo han resultado tan informales que tenemos normas como un decreto legislativo que es modificado por normas de menor rango (veamos el Decreto 1105 que requiere la autorizacin de uso de agua y su exigencia o presentacin es modificada por un decreto supremo). Adems, resulta inaudito que va el Decreto Supremo N 032-2013-EM se pretenda regresar las facultades de las regiones al MEM, lo cual hasta resultara inconstitucional, entendiendo la descentralizacin como un proceso irreversible. Todas estas son, infelizmente, prcticas tan usuales en un Estado que debe actuar dentro del marco de la legalidad.

Si hablramos de la eficiencia del proceso de formalizacin y si sincerramos los resultados, veramos que no ha funcionado. La fecha del trmino de la formalizacin fue el 19 de abril del 2014 D.L. N 1100 y debi mostrar resultados claros y no recurrir a un mismo proceso con otro nombre, denominado hoy Proceso de Saneamiento, cuya fecha de trmino es el 2016.

Nadie quiere la minera ilegal eso es cierto, pero mientras las acciones solo sean para la prensa, nuestra Amazona y nuestro pas se desangran. Y las autoridades, y quienes lucran de la ilegalidad?, bien gracias. Las polticas deben estar orientadas a la interdiccin de la ilegalidad, la formalizacin de lo que sea formalizable, a recuperar las reas destruidas y a disear un plan de reconversin de aquella gente que no alcanzar la formalizacin.