El arzobispo de Lima, cardenal Juan Luis Cipriani, afirmó hoy que la renuncia de Benedicto XVI al cargo de Papa “es un gran mensaje de humildad y un homenaje a la verdad”.
“Al tener conocimiento de esta noticia, lo primero que debo decir es que siento un gran dolor, el Papa para nosotros en la Iglesia Católica es nuestro padre y rezamos por él. Esto es totalmente inesperado, porque nunca se conversó de esto ni tenía conocimiento de que el Papa pensaba adoptar esta postura”, dijo en diálogo con Radio Programas.
Cipriani señaló que las palabras utilizadas por Benedicto XVI en su comunicado de que “no tiene vigor tanto en el cuerpo y espíritu” para conducir a la institución, demuestran que está poniendo a la Iglesia y al bienestar de los fieles por delante de él.
También sostuvo que lo más probable es que su renuncia tenga que ver con un tema de edad, porque “no parece que tenga una enfermedad, al menos nosotros no la conocemos”.
GOLPES FUERTES En otro momento, el arzobispo de Lima dijo que el papa Ratzinger “ha asumido con enorme fortaleza los desafíos que se le han presentado de manera brutal”.
“Todo este tema del mayordomo y de los ‘Vatileaks’ así como los casos de pedofilia de parte de algunos sacerdotes han sido golpes fuertes para él”, agregó.
Destacó que Benedicto XVI haya trabajado arduamente durante sus ocho de pontificado en transmitir el mensaje de que no se puede dejar a Dios de lado de la vida humana.
“El papa ha ido dialogando sobre acciones de unidad en todos los temas de fondo como que Dios no se ha olvidado de nosotros. Tenemos la obligación de utilizar nuestra inteligencia al servicio de la verdad”, refirió.
Finalmente, dijo que el compromiso de Benedicto XVI “es extraordinario” y recordó que este seguirá siendo Papa hasta el 28 de febrero.