MARTÍN ACOSTA GONZÁLEZ / (@martiacosta) Redacción online

Las aguas políticas en la provincia de Pisco están movidas, ello tras la aparición del regidor Wilfredo Yataco de la Cruz, quien denunció agresiones y amenazas, presuntamente ordenadas por el alcalde de Pisco, Jesús Echegaray Nieto. Sin embargo, para el burgomaestre, estas denuncias responderían a intereses políticos por sacarlo del cargo.

En entrevista a elcomercio.pe, Echegaray Nieto negó responsabilidad en los recientes ataques denunciados por Yataco. El primero, una agresión en su casa en la que terminó con la cabeza rota producto de un golpe con la cacha de un revólver. El segundo, un ataque con bombas lacrimógenas a la salida de un canal de cable en Pisco.

El burgomaestre se negó tener cualquier responsabilidad en los hechos violentos en contra del regidor Yataco y atribuyó estos a la ola de delincuencia de la cual es víctima el país. “Existe violencia en todo el país, pero lo que quiero negar es que yo pueda tener alguna responsabilidad en esos hechos. El señor (Yataco) fue víctima de un robo, debido a que en su casa funciona un local de venta de libros el cual mueve mucho dinero”, dijo.

Según Echegaray, el negocio monopoliza la venta de libros en la ciudad. “Mueve mucho dinero, se llevaron una laptop y dinero, pero él quiere decir que además le dijeron ‘no te metas con el alcalde’. Es decir me responsabilizan por lo sucedido”.

PODER POLÍTICO “Nosotros no acostumbramos realizar ese tipo de acciones. El grupo del señor Yataco me agrede, me insulta y acostumbra realizar ese tipo de denuncias para desacreditarme. Ellos buscan alcanzar el poder político en la provincia”.

Asegura que el partido del cuestionado ex alcalde Juan Mendoza Uribe está detrás de la campaña de desprestigio. “Ellos impulsaron una revocatoria el año pasado. Consulta que superamos con el 72% de aprobación. Ahora quieren sacarme a cualquier costo”, dijo.

DENUNCIAS Las denuncias del regidor no son poca cosa. En una nota publicada ayer en elcomercio.pe, da cuenta de una serie de irregularidades en la provincia, todas ellas, supuestamente promovidas por el burgomaestre Echegaray.

La concesión del Estadio municipal de Pisco para una empresa llamada Urbi, que pretendía hacer tiendas comerciales; la desviación de fondos de la reconstrucción de Pisco (Forsur); y por si fuera poco la venta de parte de la propiedad de la Caja Municipal, por parte miembros del directorio, elegidos por Echegaray.

El alcalde indicó que su gestión es una de las más eficientes de los últimos años. “Mi gasto es uno de los más grandes de la región, cosa que es imposible de comparar con la gestión del alcalde anterior (Mendoza Uribe), la auditoría de hace cuatro meses no encontró nada irregular”.

Asegura que el Estadio municipal sigue en construcción y que el proyecto nunca estuvo en duda, que no hubo desviación de fondos en la reconstrucción de Pisco, etc. También se mostró en contra de la venta de parte de la propiedad de la Caja municipal. “Yo me apongo a eso (la venta) y no lo permitiré. El directorio tampoco lo elegí yo. Acá no tengo responsabilidad”.