Con una votación marcadamente dividida (14 votos a favor, 10 en contra y 13 abstenciones), el Concejo Metropolitano de Lima aprobó ayer la puesta en venta de 33 lotes otorgados por empresas inmobiliarias a favor del Servicio de Parques de Lima (Serpar). El municipio decidió que estos predios urbanos sean subastados y con ello se estima recaudar un monto de S/. 8’142.500.
Si bien la ley obliga a las inmobiliarias a contribuir con el Servicio de Parques de Lima (Serpar) por cada proyecto realizado, este aporte puede efectuarse de dos maneras: abonar dinero en efectivo o entregar terrenos.
Sin embargo, para el economista Alejandro Indacochea, experto en temas inmobiliarios, “la mayoría de las empresas opta por la segunda alternativa porque ceder lotes, en lugar de pagar a Serpar, les garantiza que la liquidez de su proyecto de construcción no se vea comprometida en el futuro”. Además resalta que es un trámite sencillo, pues los lotes ya se encuentran definidos en los planos de habilitaciones urbanas.
El economista opina que la subasta pública es una buena alternativa para la Municipalidad de Lima, pues la competencia entre postores hace que se den mejores condiciones para el vendedor.
“Este es el mecanismo más transparente en la administración pública para vender predios y obtener condiciones mejoradas, si es que se trata de una subasta bien efectuada”, señala.
Indacochea destaca que los precios en que se subasten los lotes dependerán de ciertas variables como ubicación, tipo del terreno y el proyecto en sí mismo.
“El Agustino y Carabayllo son distritos emergentes y sumamente atractivos para las inmobiliarias al igual que La Molina que tiene áreas de expansión”, dice.
MAYORES INGRESOS Por su parte, el economista Jorge González Izquierdo coincide en que la subasta bien realizada garantizará mayores ingresos para el municipio. “Es lo que se conoce como la ‘subasta a martillo’, el que paga más se lo lleva”, indica.
González Izquierdo explica que en caso el precio base no convenza a los postores, la ley obliga a bajar este monto en un 15%, tantas veces como sea necesario. Al final se estaría perdiendo.
Por ello, considera que para un oportuno mantenimiento de los parques de Lima sería mejor que el aporte de las inmobiliarias sea con dinero en efectivo. “Si el precio de los terrenos en el mercado no es el mejor en ese momento, la comuna deberá esperar uno o dos años hasta que suba. Mientras tanto el dinero no puede ser destinado al cuidado de los parques”.