MARTÍN ACOSTA GONZÁLEZ (@martiacosta) Redacción online
Las noches del sábado y domingo decenas de pasajeros que llegaban del extranjero demoraron hasta dos horas en pasar el control de migraciones en el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, debido a la acumulación de vuelos y la atención de un número reducido de módulos.
Según confirmó una trabajadora de Lima Airport Partners (LAP), operadora del aeropuerto, solo 7 de 30 módulos instalados para pasar el registro de ingreso se encontraban atendiendo, en un horario de gran flujo de pasajeros.
En conversación con elcomercio.pe, el jefe del puesto de Control de Migraciones, Valentín Ayquipa, responsabilizó a las aerolíneas por concentrar sus vuelos en horarios nocturnos, generando colas y malestar entre los pasajeros.
El funcionario dijo que a partir de las 6 de la tarde llegan gran cantidad de vuelos y que el personal que tiene a cargo no se da abasto para atender el número de pasajeros. “Tenemos 33 personas por turno repartidas entre los módulos de ingresos y salidas del país. Nunca atienden los 30 módulos dispuestos”, comentó.
En referencia a las imágenes captadas por El Comercio, Ayquipa dijo que “a esa hora llega gran cantidad de vuelos. La situación se recarga, fundamentalmente por los vuelos procedentes de Estados Unidos. Las aerolíneas deben cambiar sus itinerarios, repartiéndolos durante la tarde donde está libre”. Pese al testimonio de la trabajadora de LAP, Ayquipa dijo que anoche trabajaron 17 ventanillas.
Migraciones informó que entre las 7 a.m. y las 11 a.m. llegan 24 vuelos y desde las 11 a.m. a las 6 p.m. solo 11. El funcionario agregó que las largas colas registradas ayer no son una situación que se repita de manera frecuente. “Lamentamos que los pasajeros hayan esperado y pasado un mal rato”.
“Hay temas en donde se tienen que trabajar y para eso estamos capacitando más gente para que puedan cubrir todos los horarios. Por ahora lo que hacemos es incorporar a los trabajadores de salidas a los módulos de llegadas y viceversa según la demanda de pasajeros”.
PELIGRO EN AFORO Según se informó, en la zona se encontraban aproximadamente 1.800 personas cuando el afiche de seguridad señala que solo se permite 1.300. Sobre ello, el funcionario dijo que es un peligro que tanta gente esté concentrada en un ambiente. “Esta es una situación que buscaremos arreglar. No queremos que suceda una tragedia”.