ERNESTO SUÁREZ
El agua que consume la población de la ciudad de Tacna y que es potabilizada en las 2 principales plantas de tratamiento de EPS Tacna muestra preocupantes niveles de arsénico en las pruebas realizadas semanalmente por los técnicos de la empresa.
En promedio, los niveles de este peligroso elemento químico en el agua superan los 0.04 miligramos por litro (mg/l). Los niveles máximos recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) son de 0.01 mg/l.
Según el Decreto Supremo 031-2010 de Salud que reglamenta los estándares nacionales del agua para consumo humano, el nivel máximo permisible de arsénico es similar al recomendado por OMS. Sin embargo, este mismo documento autoriza en un caso especial a admitir concentraciones de arsénico de hasta 0.05 mg/l, cuando el agua proviene de fuentes naturales hidrogeológicas, “siempre que no afecte la salud de la población”, cita el texto.
Alberto Franco, jefe del laboratorio físico-químico de EPS Tacna, refiere que se encuentran comprendidos dentro de este acápite, dado que “todas las fuentes de Tacna son de origen geotermal”, por lo que afirma están cumpliendo con la norma vigente.
AGRICULTURA EN RIESGO Sin embargo, el agua utilizada para la agricultura en Tacna, que proviene en su mayor parte del canal Uchusuma, tiene niveles por encima de 0.10 mg/l en arsénico. Esto duplica el límite máximo permisible por Salud para el riego de vegetales de tallo alto y tallo bajo, así como para ser bebida por los animales. Con esta agua se cultiva gran cantidad de hortalizas y plantas de tallo bajo que se comercializan en los mercados de la ciudad.
La OMS considera el arsénico como una de las 10 sustancias químicas más preocupantes para la salud pública , y refiere que la exposición prolongada a través del consumo de agua contaminada o cultivos alimentarios regados con esta agua puede causar intoxicación crónica, y hasta lesiones cutáneas y cáncer a la piel.