Dormir en un aeropuerto mientras se espera el momento abordar el avión puede ser una experiencia no muy cómoda. La imagen habitual de esta escena nos muestra a turistas acostados en el suelo o en sillas intentando descansar unos minutos en medio del ruido.
Sin embargo, en del aeropuerto internacional de Abu Dabi tienen una alternativa mucho más cómoda para dormilones exigentes gracias a la instalación de diez sillones que se convierten en camas con un techo corredizo que aísla a los pasajeros del ruido y de las luces.
Próximamente estas cápsulas tendrán también acceso a Internet, una zona para dejar equipaje y puntos de carga para dispositivos electrónicos.
El uso de estas minihabitaciones tiene un costo de 9,4 euros por hora. Para fin de año se espera tener instaladas 35 cápsulas más, informa la agencia Europa Press.