“Podríamos haber optado por lo fácil y haber diseñado algo más normal y menos espectacular, pero no lo hicimos”. Con este texto es que Apple presenta las prestaciones de su más reciente creación, el iPhone 5. Sin embargo, los críticos dicen que, lejos de proponer algo realmente novedoso, hay cosas que le faltan.

Desde la web CNET, que organizó un debate para seguir el evento de Apple, se destacó el hecho de que el iPhone 5 no ha resuelto la cuestión sobre cuál es el mejor teléfono de alta gama del mercado, donde sus fuerzas estarán muy igualadas con los nuevos Nokia Lumia y los Samsung Galaxy S III.

Por primera vez Apple no destaca como líder claro, indicó Roger Cheng, en un artículo para ese mismo portal donde el analista de Ovum Adam Leach señaló que sin la continua innovación Apple se arriesga a perder su atractivo ante el consumidor.

LO QUE LE FALTA Comparado con el Samsung Galaxy S III y el anunciado Nokia Lumia 920, el iPhone 5 ofrece una pantalla más pequeña aunque con mayor resolución, es más esbelto y ligero, cuenta con una duración estimada de batería y resolución de cámara similar pero no con puerto USB.

Los tres teléfonos son compatibles con redes LTE (4G), pero el iPhone 5 carece de la tecnología Near Field Communication (NFC), un sistema de alta frecuencia que permite compartir datos entre dispositivos cuando están próximos que sí incorporan sus rivales de Samsung y Nokia.

Y SIGUE FALTANDO Un artículo del Wall Street Journal, en tanto, cuestiona que el iPhone no tiene otras cosas que los competidores ya ofrecen, como el pago a través de NFC que tienen algunos dispositivos Android y aquellos que operan con Windows, en contra del Passbook de Apple, que no es más que un servicio de cupones digitales y de compradores frecuentes.

Además, se pregunta por qué el iPhone 5 conserva una pantalla de inicio con iconos estáticos en lugar de tener una más dinámica, llena de widgets y absolutamente personalizable.

Incluso el artículo agrega que “muchos teléfonos nuevos con Android usan tecnología de reconocimiento facial para permitirle a la gente obtener acceso a su teléfono” en lugar de deslizar el dedo.

Quizás la innovación más impactante ha sido la carga inalámbrica del teléfono, cosa que consiguió el Nokia Lumia con sistema operativo Windows Phone 8, mientras que el iPhone tiene un cable conector que ha sido cuestionado.