Andy Murray sorteó sin sobresaltos su primer obstáculo en el Abierto de Australia al vencer el martes (hora de Melbourne) 6-3, 6-1, 6-3 a Robin Haase.

En su primer partido de un Grand Slam desde que a comienzos de septiembre venció a Novak Djokovic en la final del Abierto de Estados Unidos, el tercer cabeza de serie impuso su autoridad ante el holandés Haase en la arena Rod Laver. La consagración en Nueva York puso fin a un ayuno de 76 años sin un campeón británico en las grandes citas del tenis.

Cuando le preguntaron sobre sus sensaciones de salir a jugar con la aureola de campeón de un Slam, Murray dijo: Ahora me puedo concentrar en la segunda parte de mi carrera.

Murray se encuentra en el mismo sector de la llave que Roger Federer y el argentino Juan Martín Del Potro.

Un desquite entre Djokovic y Murray en el Melbourne Park solo podría darse en el duelo por el campeonato, pautado para el 27 de enero.