SOFÍA CARRILLO BARRERA

Velit cuenta emocionado que pudo presenciar el primer tramo del recorrido del Dakar. Fue con un amigo y grabó de cerca a los pilotos y a la carrera. La euforia experimentada durante esas horas lo ha motivado a prepararse para las seis horas peruanas. “Quiero volver a las pistas, es algo que me da una adrenalina indescriptible desde chico”, señala.

— ¿Cuándo empezó su afición? Nací con la afición a los carros. Desde muy chico mi papá nos llevaba a mí y a mi hermano Raúl a ver las carreras. Recuerdo haber ido con él a ver revisiones técnicas, a presenciar los rally. Ya después mi hermano empezó a correr autos y yo lo acompañaba, incluso antes de que las personas como yo tuvieran la oportunidad de correr…

— ¿Las personas con discapacidad física no podían competir? La norma que permitía que corriéramos fue aprobada internacionalmente hace quince años; sin embargo, al Perú recién llegó en el 2007. Antes de eso había muchas trabas. Si bien un grupo te decía: “¡Qué bacán que corras!”, otros se oponían pensando en que era muy peligroso y en quién recaería la culpa si me pasaba algo. Pero ya con la aprobación legal, mi imposibilidad de mover las piernas no me detuvo…

— ¿Qué le provocó la paraplejia? Tuve un accidente a los 17 años. Iba en una moto por Chaclacayo y se me cruzó un camión. Ya después no pude caminar

— ¿Cómo nace su ONG Vencer? Nace en el 2008, cuando ya se me permitía correr. Ver a una persona bajando de una silla de ruedas y subiendo a un auto de carreras descuadra a cualquiera, pero de manera positiva. Ese año, junté a un grupo de amigos del colegio y les planteé la idea de crear una ONG para personas que padecieran de problemas medulares y para promover las corridas de autos.

— ¿Cuál es la meta de Vencer? Vencer a la adversidad, de ahí viene el nombre. Motivar a las personas que tienen discapacidad física. Les enseñamos a manejar, a valerse por sí mismos. Le he enseñado a seis personas a manejar sus autos. Esto les da mucha independencia. El no poder siquiera tomar un taxi por uno mismo puede ser un fuerte bajón emocional. Ahora, pueden ver por sí mismos y esto me hace muy feliz. Es un masajito al corazón saber que estás haciendo algo por los demás.

— ¿Qué mensaje quiere transmitir con su vida? Que se puede vencer a la adversidad y que nunca se debe perder la esperanza en los milagros. No me refiero a que la persona va a volver a caminar, sino que va a tener una gran fortaleza para afrontar la vida y las situaciones, cualquiera que sea. Por enfermedad, por algún accidente, por algún problema… todo se puede vencer con fe. Mírenme a mí: ¡corro autos!

— ¿Cuáles son sus planes a futuro? Correr el circuito de las Seis Horas peruanas en febrero y ¡ganar! Quiero hacerlo con Hans Samalvides, un amigo con el que ya he corrido antes, él también es discapacitado físico. Se accidentó hace algunos años y me contó que yo lo había motivado con mi historia. Una vez más, me di cuenta de que mi estilo de vida motivaba a los demás. Desde que nos conocimos, hemos hecho algunos recorridos y logramos grandes cosas. El año pasado hicimos este recorrido y quedamos terceros en la categoría. Estoy ansioso, extraño las carreras y la gente nos aclama.

— ¿Cómo está equipado su auto? Es un carro automático. El timón tiene un aro concéntrico que funciona como acelerador. Al lado derecho, está la palanca que se activa como freno cuando se presiona.

— ¿Qué impresión tiene del Dakar? ¡Es espectacular! Yo he visto algo parecido cuando he hecho Caminos del Inca en años anteriores. La gente te recibe en la entrada de los pueblos, aclaman tu nombre. Pero el Dakar es una locura que envuelve a todo el país. Acompañé a un amigo a grabar la competencia allá en Ica y me asombré de ver tanta gente en la carretera, algunos incluso hicieron parrillada.

— El Dakar ha despertado una pasión por los autos en los peruanos. ¡Así es! Esto es una muestra de que si se hace un buen espectáculo, si el automovilismo se lleva bien, puede generar trabajo y muchos ingresos. Ahora, más que nunca, el apoyo a los corredores debe ser mayor. Pilotos como yo, un peruano que es el primer parapléjico en correr carreras, necesitamos respaldo para avanzar y ganar en nombre del Perú.