Una nueva polémica se ha desatado en los Juegos Olímpicos Tokio 2020 y el protagonista es Javad Foroughi. El tirador israelí consiguió la medalla de oro en la prueba de pistola de aire comprimido 10 metros y logró un nuevo récord olímpico podría pasar de la gloria al infierno.
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Foroughi logró una puntuación de 244.8, superó al serbio Damir Mikec, que firmó 237.9 puntos, y se metió el la historia de Tokio 2020, pero hoy se encuentra en el ojo de la tormenta. El israelí podría perder su medalla de oro tras ser acusado de pertenecer a la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán, un grupo terrorista considerado por Estados Unidos.
El primer día de competencia, tras la inauguración de Tokio 2020, Javad Foroughi sorprendió al mundo entero tras ganar la medalla de oro en su disciplina. Además, de convertirse en el medallista de mayor edad de su país, pues llegó a los Juegos Olímpicos con 41 años.
¿Qué sucede?
De acuerdo a la información de los medios de comunicación que cubren Tokio 2020, el grupo iraní United for Navid (defiende los derechos humanos tras la ejecución del luchador Navid Afkari), ha solicitado al Comité Olímpico Internacional (COI) que le retiren la medalla de oro a Foroughi. El deportista está siendo investigado y se espera que en los próximos días se aclare si pertenece o no a una “organización terrorista”.
Esta compleja situación se ha iniciado porque Javad Foroughi desde hace muchos años forma parte de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) del régimen iraní, considerada por los Estados Unidos como una organización terrorista.
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