Transmitir felicidad a través de cocteles innovadores, una carta creativa y hacer que cada cliente se sienta único son los secretos del Artisan Bar de Londres, el Mejor Bar del Mundo según la prestigiosa lista de la publicación Drinks International.
Así lo explica en una entrevista con Efe Simone Caporale, uno los maestros cocteleros de este lujoso establecimiento ubicado en el Langham Hotel de la capital inglesa, que cuenta entre su clientela con miembros de la familia real británica y que atesora múltiples premios, como la mejor carta de cócteles o el mejor bartender con Alex Kratena.
Para él, la clave de un preparado etílico es superar las expectativas del cliente, hacerle lo más feliz posible, jugar con la sorpresa, ofrecerle innovación y que el cóctel tenga un sentido, una historia, una razón para que la gente lo beba, pero sobre todo tratar de hacerle lo más feliz posible y único.
LA PROPUESTA DEL MEJOR En la carta de Artesian Bar que incluye caviar de Ríofrio (Granada, sur de España) en su propuesta culinaria destaca su oferta de ron, pero también combinaciones como The Langham Martini, con aromas de yuzu, lavanda y ruibarbo, entre otros; distintos tipos de gin-tonic, los cócteles clásicos, tal cual o revisados, y aquellos diseñados para sentirse reconfortado o sexy.
Para no errar en la elección, un mapa del sabor guía al cliente para decantarse entre casi 40 opciones, que viajan desde el sabor ligero al vibrante, pasando por los afrutados y los secos.
A la hora de escoger un cóctel, recomienda, hay que dejarse llevar por el estado de ánimo además de por el gusto personal. En una tarde fría a mí me apetece algo reconfortante como un Manhattan y un Martini con su explosión de sabor en primavera, confiesa este bartender nacido en Como (Italia), que esta semana ha presidido en Madrid el jurado de la World Class Competition, uno de los principales certámenes internacionales de mixología.
La revolución de la coctelería, liderada por Londres y Nueva York, se ha visto beneficiada por la que también ha experimentado la alta gastronomía, ya que ambos ámbitos tienen cada vez más puntos en común.