CATHERINE CONTRERAS
¿Alguna vez has intentado filetear un pejerrey? No es tarea fácil obtener de este pequeño pescado un filete impecable, entero y sin rastros de espinas ni escamas. Por eso el Instituto Condoray de Cañete decidió desde el año pasado destacar el oficio de quienes son expertas en limpiar y cortar pescado, impulsando la revaloración de este indispensable eslabón de la cadena gastronómica.
La iniciativa, además, ha generado el interés y sana competitividad entre las mujeres (y un joven emprendedor) de la provincia sureña.
Lo notamos así al participar en la sétima edición del Concurso Gastronómico Sabores de Cañete 2013, un certamen que año a año se realiza en las instalaciones del centro de formación profesional para la mujer cañetana Condoray, que celebra 50 años de creación.
Asimismo, este año los organizadores rindieron homenaje al recordado chef Iván Kisic, quien apoyó el emprendimiento que cada año genera este certamen.
CUCHILLOS AFILADOS Yesenia Vicente Francia confiesa que se puso nerviosa y que no pudo avanzar como habría querido. Dice que la tabla de picar y la mesa de acero se movían mucho, y que ella está más acostumbrada a su humilde mesa y tabla de madera.
Ella tiene 34 años y hace 20 aprendió a filetear en Imperial el pejerrey que le llega del puerto de Cerro Azul.
Lo curioso es que Yesenia midió su habilidad con el cuchillo con tres miembros más de su familia: sus hermanas Rosa y Karina, y con su madre, Celia Francia Mendoza, quien lleva más de 30 años fileteando.
TODOS GANAN Este año, la segunda edición del concurso ya no se llamó de fileteadoras, sino de fileteadores. Ello se debe a la presencia del único varón del grupo: Jean Paul Achira.
Notoriamente nervioso, el joven fileteador nos contó que aprendió siendo pequeño, pero su estilo es lento y seguro. Hijo de pescador, aprendió a cortar pescado con su mamá, que también participó en el certamen, ambos representando a Mala. Jean Paul no ganó el premio, pero se sintió muy feliz de participar.
La ganadora fue Hellen Mayra Manco Siriaco, luego del desempate realizado con la campeona del año anterior Rosa Campos Ávila. Ambas llegaron desde Cerro Azul para demostrar la valía de mujeres que diariamente logran filetear 160 kilos de pescados cada una. ¡Sorprendente!