Israel perpetró un ataque aéreo en Siria contra un cargamento de misiles destinado a la guerrilla de Hezbolá en el vecino Líbano, dijo el sábado un funcionario israelí.
El Estado judío había dejado claro que estaba preparado para recurrir a la fuerza para evitar que las armas sirias avanzadas, incluyendo el arsenal químico del presidente Bashar al-Assad, acabe en manos de Hezbolá o de rebeldes islamistas que participan en una revuelta contra su gobierno que se prolonga por más de dos años.
Hezbolá, aliado de Irán, el archienemigo israelí, libró una guerra inconclusa con Israel en 2006 y continúa siendo una amenaza potente a ojos israelíes. Además, a los israelíes también les preocupa, si Asad es derrocado, que los combatientes islamistas dirijan sus armas a su vecino, después de cuatro décadas de relativa calma a lo largo de la frontera de los Altos del Golán.
El gobierno israelí no confirmó oficialmente el ataque aéreo del viernes, que fue revelado a Reuters por un funcionario israelí que habló bajo condición de anonimato.
Hubo un ataque aéreo. El objetivo no era una instalación de armas químicas, eran misiles destinados a Hezbolá, dijo el funcionario a Reuters. Un funcionario estadounidense dijo a Reuters que el objetivo era aparentemente un edificio.
El ataque, la segunda ofensiva aéreo israelí contra un blanco sirio en cuatro meses, tuvo lugar después de que el gabinete de seguridad del primer ministro Benjamin Netanyahu aprobara la medida en una reunión secreta la noche del jueves, dijo una fuente de seguridad regional.