Este martes, la oposición al régimen de Bashar al Assad tomó el puesto de Siria en la cumbre de la Liga Árabe, apoyado por los demás jefes de estado que han decidió aislar políticamente al presidente sirio. Ahmed Muaz al Jatib representó a Siria ante la cumbre que se desarrolló en Doha, Qatar, a pesar de anunciar el domingo que renunciaría como líder de la Coalición Nacional Siria, y de las divisiones internas.
Al Jatib consideró que este hecho forma parte de la vuelta de la legitimidad al pueblo de Siria, que fue privado de ella desde hace mucho tiempo. Queremos la libertad y no queremos que Siria llegue a la ruina. Queremos establecer la justicia de transición y una solución política clara para evitar que ese régimen cometa más barbaridades, subrayó.
En su discurso de apertura en la cumbre, el jeque de Qatar, Hamad bin Khalifa al Thani, señaló que la oposición merece ese nivel de representatividad, por haber obtenido legitimidad popular en su país y un amplio apoyo en el extranjero; e instó a la ONU a detener la opresión y represión del pueblo en Siria, y presentar a los responsables por estos crímenes contra el pueblo ante la justicia internacional.
OPOSICIÓN SIRIA NECESITA APOYO BÉLICO Al Jatib anunció en la cumbre de Doha que ha pedido al secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, que las fuerzas de su país ayuden a defender las regiones controladas por los rebeldes, y contrarrestar los helicópteros y aviones de guerra de Assad.
Representantes de la OTAN han descartado esta propuesta, pues la alianza militar occidental no tiene intención de intervenir militarmente en Siria, que representa una seria amenaza a la estabilidad y seguridad en la región. “Nosotros respaldamos plenamente los esfuerzos de la comunidad internacional por hallar una solución pacífica, dijo un funcionario.