El canal de noticias venezolano Globovisión, amenazado constantemente por el Gobierno por su dura línea opositora, anunció el lunes que recibió una oferta de compra por parte de un empresario local, que sería aceptada por problemas jurídicos, económicos y políticos que enfrenta la empresa de televisión.
El vicepresidente ejecutivo de Globovisión, Carlos Zuloaga, anunció que el canal de noticias no ha sido vendido; sin embargo, aclaró que ya hay ‘una oferta de compra formal’ y ‘una intención obligada de venta’, informó el canal privado en su página de internet en una breve nota.
El proceso se concretaría después de las elecciones presidenciales del 14 de abril, dijo el ejecutivo según la nota del medio, al que el Gobierno del fallecido presidente Hugo Chávez acusó repetidamente de golpista y desestabilizador.
INVIABLE ECONÓMICA Y JURÍDICAMENTE Directivos y abogados del canal, que no tiene alcance nacional, se reunieron el lunes después del mediodía con los trabajadores de la empresa para anunciar que la oferta es del empresario Juan Domingo Cordero, directivo de Seguros La Vitalicia.
Carlos Zuloaga dijo que Globovisión, en manos de los Zuloaga, es inviable económicamente, jurídicamente y políticamente, dijo una periodista que asistió a la reunión. Se espera que en las próximas horas los directivos de la empresa emitan un comunicado.
EL GOBIERNO DEBE AUTORIZAR VENTA El regulador de las telecomunicaciones, el estatal Conatel, ha abierto en los últimos años varios procedimientos administrativos de sanciones contra la planta, que a mediados del 2012 debió pagar una multa de 9,3 millones de bolívares (unos dos millones de dólares al cambio de la época). El organismo debe aprobar la transacción.
El Gobierno posee una extensa red de medios de comunicación, en un intento de hacerse con lo que llama la hegemonía comunicacional, con lo que pretende combatir a los medios privados.
En el 2007, las pantallas del canal privado de televisión RCTV uno de los más antiguos del país y de más alta audiencia cesaron sus transmisiones luego de que el Gobierno no renovara su concesión, tras los fieros ataques del presidente Chávez, que acusaba al canal de golpista.