Kim Kardashian causó preocupación entre sus familiares y amigos luego de ser internada en una clínica tras sufrir complicaciones con su embarazo.
La celebridad de los realities estadounidenses había viajado junto a su novio Kanye West hasta París para participar de la Semana de la Moda cuando empezó a sentir mareos en pleno vuelo.
Tan pronto como aterrizó se puso en contacto con los suyos porque no se encontraba bien, relató el New York Post, el mismo que explicó que se le aconsejó a Kardashian guardar reposo.
Sin embargo, ha sido la propia Kim la que ha sorprendido al compartir en su cuenta de Instagram unas fotografías que la muestran en una salida nocturna junto a sus hermanas.
A estas imágenes se le ha sumado la polémica de amigos de Kardashian que aseguran que ella se niega a dejar su rutina normal de ejercicios pese a lo avanzado de su embarazo.
Ella no se está cuidando. Además de entrenar con Tracy Anderson lo hace con otro entrenador personal, señaló una fuente al citado diario, que también muestra fotografías de Kardashian luciendo tacones altos, algo no recomendado para las madres gestantes.