Alianza venció 1-0 a Cristal con un tanto de Walter Ibáñez en el Estadio Nacional, en un partido que, además, significó la despedida del delantero Yordy Reyna del equipo.
TRES CONTRA DOS. Wilmar planteó bien. Colocó tres volantes (Albarracín, Uribe y Cartagena) para desconectar del juego a Lobatón y Calcaterra. De este modo, Cristal sufrió para meter la pelota en el área contraria. Mejoró cuando entró Sheput, equiparó la posesión, pero no le bastó. La presión que ejercieron los tres hombres de Valencia en el medio fue fundamental para neutralizar la creación de los celestes. Lo que le faltó a esta volante íntima fue solo el pase gol. Dieron salida prolija, pero le faltó un volante tipo Sheput que habilite a Mostto o Aguirre. Bazán no se da abasto.
DUELOS INDIVIDUALES. En el esquema que Valencia planteó tuvo a tres volantes más aplicados para la marca que para el pase gol. De este modo, obligó a Bazán, Aguirre y Mostto (su trío de ataque) a ganar los duelos individuales. Ninguno tuvo éxito arriba. Pero sí abajo. Aguirre se comió la banda derecha. No dejó a Valverde trepar y ayudó a Donayre en la marca de Ross. Igual Bazán por el lado izquierdo. Ambos, sin dudas, fueron más efectivos en defensa que en ataque. Con los tres del medio tapando a los creativos, y estos a los laterales, Cristal sufrió para crear.
ACTUACIONES SUPERLATIVAS. Sorprendió lo de Donayre por la banda derecha, y Branco Serrano por la izquierda. Ambos no desentonaron en un partido de alta competencia. El primero anuló a Ross y el segundo, con menor intensidad, a Ávila. De hecho, lo obligó a abandonar el sector derecho para ir al medio y buscar un espacio por donde entrar. No lo logró. Lo de Ibáñez y Aparicio fue importante en defensa. Estuvieron sobrios. Aún más Ibáñez porque anotó el gol del triunfo. Pero la figura del partido fue Paulo Albarracín. Bien para el quite y la distribución. Corrió mucho y bien. Solo le faltó el gol o el pase gol. Se asoció casi a la perfección con Cartagena.
SACÓ PROVECHO DE LAS OCASIONES. No fueron muchas las opciones de gol generadas por ambos. Hasta el gol, Alianza prácticamente no había tenido una clara. Luego del tanto de Ibáñez, Cristal se adelantó y el partido le quedó perfecto a los íntimos para la contra. Tuvo dos más: un cabezazo de Ibáñez que Penny salvó en la línea y un remate de Yordy, apenas desviado. De tres, hizo una. Sacó provecho de sus ocasiones. No pasó lo mismo con Cristal. Sheput la tuvo debajo del arco y erró. Rengifo tuvo dos de cabeza…y erró. Alianza, entre muchas otras cosas, como el orden entre sus líneas, se llevó la victoria por un tema de eficacia de cara a la definición.
BIEN EN DEFENSA. Tuvo un principio básico: “Corremos todos”. Los íntimos permitieron a los celestes crear apenas dos situaciones claras de gol. Una de Sheput y otra de Rengifo. Después, nada. El equipo, en defensa, estuvo 8 puntos. Hubo mucha solidaridad, actitud. De hecho, Aguirre se dio el lujo de robar varios balones en su propia área. Lo mismo sucedió con Bazán. Cartagena, como ancla, excelente para los relevos y hacer el dos contra uno. Iba a las bandas en ayuda de los laterales y le dio una salida limpia al equipo. Ibáñez y Aparicio sacaron todo por abajo y arriba. Solo se les escapó Rengifo, quien remató desviado de cabeza.