HORACIO ZIMMERMANN (@Horacon) Redacción Online
Cristal dio una lección de fútbol a la U y lo aplastó 4-0 en el Estadio Nacional. El equipo de Roberto Mosquera fue superior en todas las líneas. Aquí la explicación de por qué ganó:
Ataque ejemplar. Los rimenses dieron una lección a los cremas y demás equipos del torneo de cómo atacar. El equipo celeste ingresó por los costados y definió por el centro. Los cuatro goles fueron de esa manera. Privilegió el juego colectivo, enriquecido por las individualidades y buenos movimientos de Ross y Ávila por los extremos. El equipo de Mosquera fue rápido para pasar de la defensa al ataque. Mostró un juego de mucha movilidad y no estático, como el de los merengues.
El medio y las áreas. Mosquera envió a Cazulo, Lobatón, Calcaterra y Sheput al medio campo. De esta manera, ganó posesión de la pelota. Los tres últimos se repartían el trabajo de crear –aunque Calcaterra también robó muchos balones–, mientras el uruguayo recuperaba. El medio rimense se comió al crema. No lo dejó que meta la pelota en su área. Obligó a Gonzales y Vargas a ser los generadores de juego, y esto es lo peor hacen. En las áreas, Cristal fue superior. Atrás no sufrió y adelante generó ocho ocasiones de gol. Aprovechó cuatro y goleó.
Actuaciones superlativas. La Ávila, un delantero con buena capacidad para desmarcarse. Se movió por izquierda, derecha y el centro. Anotó un gol y dio dos pases gol. La de Calcaterra. El argentino estuvo impecable en la marca. Le faltó un poco en la creación. Jugó en dos posiciones en el mediocampo y en ambas resolvió con inteligencia. También destacaron Cazulo en la recuperación y Rengifo. ¿Por qué Rengifo? Entró y estuvo presente en las jugadas de los dos goles finales.
Mala defensa crema. Equipo que defiende mal, pierde. Lo dijo alguna vez el ‘Maño’ Ruiz. Le tomamos la palabra. La ‘U’ defendió pésimo. A un equipo que le generaron ocho ocasiones claras y otras no tan claras, habla de lo mal que la pasó. A esto se sumó el bajo rendimiento de su pareja de centrales en la segunda etapa: Allocco-Duarte. El argentino falló en tres de los cuatro tantos de los rimenses. En el medio, la ‘U’ ganó la pelota en la segunda etapa, pero no tuvo profundidad. No pasó de una que otra llegada por acciones individuales.
Mosquera vs. Comizzo. El duelo lo ganó Mosquera. De lejos. El DT rimense envió por primera vez a Calcaterra, Cazulo, Lobatón y Sheput juntos. La propuesta le funcionó. Cristal generó más ocasiones y no dejó a la ‘U’ generarlas. La ‘Mosca’ metió en el segundo tiempo a Rengifo por Sheput, con lo que Lobatón se adelantó unos metros. Y también le funcionó. Obligó a los cremas a tenerla sin profundidad, obligando a Toño y Vargas a ser los creadores, algo que no son. Comizzo, en cambio, falló. La ‘U’ tenía un problema: no generaba. Así y todo metió a Ximénez y Fernández. Ni la tocaron. Y, claro, si la pelota no llegaba al área. Si no estaba Christofer, era necesario un jugador similar a él. Rainer no siente la tarea de ser el 10. Comizzo equivocó los cambios y Mosquera se llevó el triunfo táctico.