“Hay que ganar esta copa pensando en los que vienen detrás”, dijo alguna vez, durante el régimen militar de 1975, Héctor Chumpitaz. “Quizá yo ya no podré volver a jugar en un equipo grande por mi edad, pero ahora todos mis compañeros tienen la gran oportunidad y haré todo lo posible. Ese es mi sueño y espero colaborar”, señaló Paolo Guerrero meses antes de que la selección peruana juegue el Mundial Rusia 2018. Entre esas dos declaraciones hay 43 años, pero ambas encajan en una misma definición: capitán. Aquel líder que no solo arenga dentro del campo, también es ejemplo. Para sus compañeros y la hinchada.
La cinta de capitán de la selección peruana es casi un tema nacional. El que se la coloque en el brazo izquierdo asume la responsabilidad de ser la cabeza, el guía. La voz del técnico en medio de un partido. A lo largo de la historia son muchos los futbolistas que fueron capitanes en la ‘Bicolor’. Algunos, como Chumpitaz, Guerrero y Juan Reynoso, tuvieron mucha aceptación. Otros no. Y están también los que sin decirlo esperan su oportunidad. Como Renato Tapia, que a sus 25 años ya da señales de tener pasta para ser el próximo conductor del equipo de todos.
LEE TAMBIÉN: Juan Reynoso: los testimonios desde México que reconocen el liderazgo del técnico que hizo historia con Cruz Azul
Juan Reynoso, el líder que todos querían
“Mucho se habla de que es importante tener jugadores con experiencia para poder ayudar al entrenador dentro del campo, auxiliarle cuando sea necesario. Él era así”. Así definió Óscar Pérez a Juan Reynoso. El ‘Conejo’, compañero y amigo del peruano desde el título del 97 conseguido por Cruz Azul, hoy trabaja junto a él en el club mexicano. De hecho, el último domingo ambos consiguieron romper con la sequía de 23 años y sacaron campeón nuevamente a los ‘cementeros’ en el fútbol mexicano.
Si hay algo que caracteriza a Reynoso desde su etapa de jugador es ser líder. Uno solidario, consecuente con sus actos. Lo fue en Cruz Azul y también en la selección peruana. El ‘Cabezón’ era el capitán de la selección de Juan Carlos Oblitas entre 1997-99. Con la cinta en el brazo disputó las Eliminatorias rumbo a Francia 98.
Cuando Francisco Maturana sustituye al ‘Ciego’, el técnico colombiano decidió no llamar a Reynoso y optó por convencer a Chemo del Solar para que regrese a la selección. Le dio la capitanía, un acto que no cayó bien en la interna del equipo. Varios jugadores se mostraron molestos por la decisión del DT de sacar al entonces central de Cruz Azul.
Juan Máximo se había ganado el respeto de sus compañeros por su carácter fuerte y su don de liderazgo. Incluso en una ocasión había peleado por un premio especial para los seleccionados que juegan en el exterior.
Claudio Pizarro y cuatro procesos con la cinta
Debutó en 1999 hasta que repentinamente no lo llamaron más en el 2016. Cinco procesos clasificatorios a un Mundial y en cuatro fue capitán. Cuestionado y criticado, sí. Pero elegido por los técnicos también. Quizá con el argumento de su exitosa carrera en Alemania.
Paulo Autori fue el primero en darle la cinta. Lo siguieron Chemo, Sergio Markarián y Ricardo Gareca. Con Del Solar tuvo problemas luego del Golf Los Inkas y con el ‘Tigre’ se dio su repentino adiós en 2016, luego de la derrota 1-0 ante Uruguay. En el medio también pasaron entrenadores fugaces como Fredy Ternero (2005), Franco Navarro (2006), Julio César Uribe (2007), Roberto Mosquera (2013) y Pablo Bengoechea (2014). Todos también lo tuvieron en cuenta.
De la relación entre Pizarro y la selección se han dicho muchas cosas. Con respecto a la capitanía y el significado de ser líder, también. Sobre este tema, el escrito José Carlos Yrigoyen, en su libro “Con Todo, Contra Todos”, señala lo siguiente:
“[...] Chumpitaz y Guerrero son los únicos referentes de la historia. Y la antítesis es Claudio Pizarro. Hace poco Paolo dijo: “Quizá no iré al Real Madrid, pero quisiera ver a Flores y Cueva jugando ahí”. Jamás lo habría dicho Pizarro. No tiene la generosidad para ello. Un capitán no puede decir: se fueron de juerga, sí, pero no soy su niñera. Una declaración así escandalizaría a Chumpi. Mucho del marasmo en la selección de los últimos años tiene que ver con un capitán indolente. El incidente con Franco Navarro, no querer jugar, mandarle una carta, irse y luego decir: llévenme al Mundial. ¿Qué es eso? La declaraciones de Pizarro tienen que imprimirse y pegarse en todas la categorías de menores con el título “Esto es lo que no se debe hacer como capitán de la selección [...]”
Desde 2007, Claudio portó la cinta en 36 partidos. El saldo es malo: 11 triunfos, 11 empates y 14 derrotas. Pero más allá de los resultados, el exdelantero nunca tuvo la aprobación de la hinchada por su bajo rendimiento en cuanto a goles en la ‘Bicolor’, comparando lo que hacía en la Bundesliga.
Paolo, un líder guerrero
“Si me quieren sacar de la cancha, me tienen que matar”. Las palabras de Paolo lo describen a sí mismo a la perfección. Un guerrero con todas sus letras. Un líder que no dudó en plantarse cara a cara con Javier Mascherano cuando las papas quemaban en un empate entre Perú y Argentina jugado en La Bombonera.
Paolo tomó la cinta por primera vez en la Copa América 2011, cuando Sergio Markarián decide llevar a Argentina un equipo con solo dos referentes: él y Juan Vargas.
Recién en el partido por el tercer lugar, sin el ‘Loco’ en campo, Guerrero fue capitán. El ‘Depredador’ marcó un gol en el 4-1 ante Venezuela, nos dio la medalla de bronce y acabó el certamen como máximo goleador con cinco tantos.
Desde ese entonces hasta la actualidad, Paolo se convirtió en el líder de la selección. Uno querido por el hincha y sus compañeros. Un capitán que se ganó ese estatus con sus actos: este lunes, por ejemplo, llegó a Lima alrededor de las 2 de la tarde y de inmediato se sumó a los trabajos de la ‘Bicolor’ con miras a los partidos ante Colombia y Ecuador por Eliminatorias.
Renato Tapia, la cinta te espera
“Capitán del futuro”, es su chapa. No se la puso él ni la prensa, sino sus compañeros. Todo a raíz de unas declaraciones de Ricardo Gareca. “Tiene cosas de líder. Es un chico que habla y hasta los grandes lo escuchan”, dijo en alguna oportunidad el técnico de la selección peruana sobre el volante. Luis Advíncula fue el primero que lo llamó así. Desde entonces el apodo quedó impregnado en él y calzó perfecto en su juego aguerrido.
“La cinta le pertenece merecidamente a Paolo Guerrero, y se eso se respeta. Si en el futuro me toca, ojalá lo haga bien. Pero este equipo tiene más de un líder, y eso es bueno para lo que se viene”, señaló Tapia en una entrevista a FIFA.com.
Con 25 años, Renato ya disputó una final de Copa América y un Mundial. Y ha demostrado en todo momento ser un referente en una selección que tiene como capitán a Paolo Guerrero. Pero cuando el ‘Depredador’, con 37 cumpleaños encima, se retire, el ‘Cabezón’ tomará la posta.
La empatía que ha generado con la población con sus muestras sociales también lo han colocado como el líder que la gente quisiera ver en la selección. Tiene el mismo perfil que Guerrero y no estamos diciendo que le deba reclamar la cinta, sino que en Renato Tapia hay un carácter que ha nacido gracias a su profesionalismo y conciencia social.
La cinta la han sabido llevar Christian Ramos y el mismo Luis Advíncula y lo han hecho de la mejor manera. Cuando le toca colocársela a Renato Tapia, seguro lo hará como esa responsabilidad manda.
MÁS EN DT
- Brasil pone en duda ser el organizador de la Copa América 2021 tras el anuncio de Conmebol
- Luis Advíncula arribó a Lima para sumarse a la selección con miras al reinicio de Eliminatorias
- Perú vs. Colombia: día, hora y canales para ver el partido por Eliminatorias Qatar 2022
- Hugo Sánchez sobre la posibilidad de dirigir al Real Madrid: “Florentino sabe que estoy dispuesto”
- Oficial: Sergio Agüero es nuevo delantero de Barcelona