Gabriel García Márquez se dejó ver en público tras un largo periodo alejado de los medios al asistir a la inauguración de un centro de juegos en Ciudad de México, donde vive desde hace 52 años.

Me siento bien, la comida estuvo bien, dijo el autor de Cien años de soledad durante la apertura del centro que se realizó la noche del domingo.

Gabo, de 86 años, y su esposa, Mercedes Barcha, fueron los encargados de cortar la cinta de inauguración del Royal Bol, una sala de juegos en el exclusivo complejo Garden Santa Fe.

La agencia mexicana Notimex, que publicó fotos en las que puede verse a García Márquez luciendo un traje de color gris y camisa azul, afirmó que al Premio Nobel de Literatura 1982 se le vio con el buen humor y entusiasmo que lo caracteriza.

Se notaba contento, lúcido y fuerte, posó para las fotografías que le tomaron familiares en la mesa, así como reporteros gráficos, indicó el medio.

En una de las fotografías, el cerebro del realismo mágico hizo su característico signo de pistola con su mano derecha, con el que ya ha posado en otras imágenes en el pasado y hace alarde al humor festivo que caracteriza su tierra natal Aracataca.

El año pasado el escritor colombiano fue objeto de una serie de especulaciones sobre su salud, después de que su hermano menor Jaime García Márquez asegurase que el autor padece demencia senil.

La información fue desmentida por Jaime Abello Banfi, director de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano y amigo cercano de García Márquez.

Al escritor colombiano le fue diagnosticado en 1999 un cáncer linfático del que se sanó. Desde entonces han surgido varias especulaciones sobre supuestos problemas de salud.